domingo, 9 de diciembre de 2007

Huckabee y el SIDA

"Si el gobierno federal es verdaderamente serio a la hora de hacer algo con el virus del SIDA, necesitamos dar pasos para aislar a los portadores de esta plaga." (...) "Es difícil entender la política pública sobre el SIDA. Es la primera vez en la historia de la civilización en la que los portadores de una plaga genuina no han sido aislados de la población general, y en la que esta mortífera enfermedad para la que no hay cura es tratada como un tema de derechos civiles en lugar de la verdadera crisis de salud que representa." (...) "En vista de los fondos extraordinarios destinados ya a la investigación del SIDA, no parece justificado un gasto federal adicional."

Estas palabras suponen el capítulo más reciente del continuado escrutinio al que está siendo sometido el Gobernador Mike Huckabee por todo lo que ha hecho y dicho durante toda su carrera política. Es el precio de ser el nuevo centro de atención. La pasada semana se rescataba el Caso Dumond que, hasta el momento, no parece haber tenido consecuencias en su acelerado ascenso en los sondeos. Y este fin de semana se ventilan sus antiguas declaraciones sobre las políticas contra el SIDA: aislar a los pacientes, oposición a gastar dinero público en la búsqueda de una cura -las celebridades como Madonna deberían pagar las investigaciones-, y señalar la homosexualidad como un "peligro para la salud pública".

Las declaraciones llevan fecha de 1992, época en la que ya se tenía conocimiento de suficientes detalles sobre las formas de contagio de la enfermedad, y sobre el sinsentido de las medidas de aislamiento del enfermo respecto a su entorno social. Ya no estábamos a principios o mediados de los 80, cuando era habitual que ni el Secretario de Prensa de la Casa Blanca, Larry Speakes, supiera responder adecuadamente, e hiciera chistes y gracias al dar respuesta al creciente número de preguntas que le llegaban sobre aquella nueva y desconocida enfermedad que sólo parecía afectar a un grupo reducido de gays. En la segunda mitad de los 80, historias como la del niño Ryan White -conocido como el poster boy del SIDA- ayudaron a educar a la opinión pública estadounidense en la crisis del SIDA, y a comprender que la enfermedad podía afectar igualmente a niños hemofílicos o parejas heterosexuales blancas de clase media.

No se tiene constancia de que en Arkansas tardaran más años en recibir la información. Por lo que las palabras de Huckabee pueden encontrar difícil justificación en el comodín del desconocimiento y la falta de información. Este asunto, interesadamente ventilado por Associated Press, y detrás del cual algunos dicen que podría estar la campaña de Mitt Romney, sí que podría llevar al cuestionamiento del punto fuerte de Huckabee: su carácter fraternal y compasivo. La imagen del pastor de valores estrictos que no expresa intolerancia, sino comprensión, frente al pensamiento divergente o los modos de vida antagónicos.

Aunque en su favor hay que decir que, en años recientes, como Gobernador y ahora como candidato a la Presidencia, ha reiterado en varias ocasiones su apoyo a los esfuerzos para redoblar el compromiso de Estados Unidos en la lucha mundial contra el VIH, aumentando al doble los 15,000 millones de dólares de dinero federal asignados inicialmente en un acta de 2003. Podríamos llegar a la conclusión de que su postura de 1992 seguía el argumento de un guión "electoralista". Un razonamiento interesado empleado sólo con el propósito de convencer al electorado de un estado conservador donde en aquellas fechas pudiera existir aún cierta intolerancia y miedo hacia el tema en ciertos sectores que necesitaba ganar. De ser así, Huckabee estaría sufriendo las consecuencias de lo mismo de lo que se viene acusando al Romney de Massachusetts por haber adaptado su mensaje al progresismo de su estado para ganar las elecciones.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

bueno, ahora las cosas se ven de modo distinto. El SIDA y el mundo gay. Por ejemplo, hablar del matrimonio entre homosexuales en ESPAÑA en el 1992 habría provocado hilaridad general. En 2007 está aprobada por LEY.

pero en 1992 se rodó Philadelphia con TomHaks, donde se mostraban claramente las dudas y prejuicios que se tenían respecto a la enfermedad y los grupos gays. Y en un entorno de alto nivel social y cultural.

y en 1992-3, fue cuando Magic Johnson dijo que tenía SIDA. Las cruces que se hicieron pensando que cómo un jugador ejemplar había pillado una enfermedad de gays. Algunos jugadores se negaban a jugar con él. Y él notaría esa presión silenciosa....de la que habla la película de Tom Hacks.

las palabras de Huckabee, sacadas de contexto temporal y textual (se conoce el texto completo?) no tienen ni pies ni cabeza.

pero me juego un duro sevillano, a que la mayoría de la ciudadanía mundial, sigue pensando que el SIDA se transmite por el sudor, el tacto, la saliva, etc...

Anónimo dijo...

el texto anterior es mío.

Jordi Coll dijo...

Vaya con el secretario de prensa de Reagan...

Recordáis la imagen de Magic Johnson en el suelo y ningún jugador queriendo ayudarlo a levantarse? Era pequeño cuando lo vi y me impactó bastante.

periplaneta dijo...

no recuerdo esa imagen.

pero sí que algún jugador expresó su negativa a jugar con él.

aseguraba que después de un partido, los jugadores acababan con arañazos, y se sangraba en ocasiones. Y en un deporte de tanto contacto, podía haber riesgo de contagio.