Joe Trippi, el padre del "aplanamiento de la política", el hombre que llevó a Walter Mondale a ganar el Caucus de Iowa en 1984, y se dio a conocer al gran público hace cuatro años como campaign manager de Howard Dean, reflexiona en su último artículo sobre lo ocurrido en esta campaña electoral desde el pasado 29 de agosto -día en que McCain sorprendió a la concurrencia con la selección de Sarah Palin. Trippi considera que la jugada va más allá de lo que apuntaban las primeras reacciones, y está modificando el mensaje de McCain. It's Not Just Palin -- It's the Message
(...) There is no question that John McCain's pick of Alaska Governor Sarah Palin has changed the dynamic of the 2008 Presidential campaign, moved the current wave of polling to the GOP's favor, and altered the terrain the rest of the election will likely be fought on.
The Obama campaign's ability to recognize the shifting ground, understand that it is real, and adjust accordingly will determine the outcome. And the outcome, for the first time, is in doubt.
The Obama campaign went into the Democratic National Convention believing that the race would be fought out on Washington experience and "more of the same" vs change. This was essentially the same frame of the race the Obama camp had sustained for the first 16 months or so of the nominating fight with New York Senator Hillary Clinton. It worked in the primaries until the Clinton campaign shifted from "35 years of experience" to a much more "woman for change" oriented message in the later stages of the fight and nearly came back to win the nomination.
Continúa... (...)
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3 comentarios:
¿También crees que el retroceso de Carter se dio al abandonar el papel de outsider o a que Ford encontró el mensaje que tenía que dar?
Eran otros tiempos. Yo creo que América en el 76 empezó a sentirse mejor, coincidiendo con las celebraciones del bicentenario y el "espíritu del 76" aquel verano, y casi simultaneamente Ford lanzó aquel eslogan "Feeling Good About America", explotando su condición de Presidente normal, discreto, honrado, sin ambiciones personales... yo creo que eso fue importante. Los americanos empezaron a sentirse un poco mejor sorbe su país, y a sentirse confortables con un Presidente de perfil bajo como Ford, que no se parecía en nada a los anteriores.
Pero supongo que también habrá algo de lo que comenta Trippi. Hamilton Jordan estaba dentro de la campaña, así que sabría por qué sería. Pero al fin y al cabo es lo mismo que te digo. Mientras los demócratas seguían mencionando el Watergate (por ejemplo en su Convención constantemente) en todos sus discursos, los americanos empezaban a ver a Ford como un hombre ajeno a todo eso, que se situaba por encima de las luchas partidistas.
Greenspan en sus memorias habla mucho de Ford, su presidente. Cuenta que al principio de la administración de Bush hijo estaba muy emocionado porque muchos de los miembros del gabinete (Cheney, Rumsfeld, O'Neill...) trabajaron con Ford y tenía la esperanza de que trabajaran con la misma eficacia que había visto en aquel equipo. Se llevó una decepción.
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