Con la triple victoria de John McCain ayer, muchos comenzarán a presionar a Mike Huckabee para que se retire. Su gente había depositado mucho esfuerzo e ilusión por poder ganar en Virginia. Hubiera sido un notable golpe de efecto, su primera victoria en un estado de tipo winner-takes-all. Pero el Senador McCain terminó revasando el 50% en Virginia.
Anoche en la CNN hacían un cálculo según el cual, aunque Huckabee ganase con un 55% todos los estados que quedan por votar, no le alcanzaría para lograr la nominación debido al reparto proporcional de los delegados. Lo que queda por delante en el mes de febrero no parece estar hecho para él. Wisconsin parece territorio McCain, y el resto son lugares exóticos como Guam, Samoa o Puerto Rico. El ex Gobernador de Arkansas dice estar dispuesto a seguir hasta Texas, pero puede que el camino le resulte demasiado largo.
Fue una noche feliz para McCain. No dejó lugar a las dudas. En su discurso se centró por primera vez en criticar a Barack Obama como un candidato insustancial. "Amigos míos, la esperanza es algo poderoso. Yo he visto la esperanza de los hombres puesta a prueba de una manera dura y cruel como pocos la experimentarán... animar a un país sólo con retórica más que con sólidas y probadas ideas que confían en la fortaleza y el coraje de la gente libre, no es una promesa de esperanza. Es una obviedad."
miércoles, 13 de febrero de 2008
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