A un mes exacto para las elecciones, y mientras McCain se tomaba el sábado libre para preparar el próximo debate, el Senador Barack Obama estuvo en Newport News, una ciudad mediana, de unos 182,000 habitantes, situada en el extremo suroeste de Virginia, a orillas del mítico James River. A sólo cuatro semanas de la elección, para Obama ya es una victoria táctica poder estar haciendo campaña en un estado que no vota por un candidato presidencial demócrata desde 1964.
El candidato demócrata centró su intervención en las políticas de asistencia sanitaria. "Bajo el plan de McCain, al menos 20 millones de americanos perderán el seguro con el que cuentan en su lugar de trabajo," dijo Obama repitiendo una línea ya mencionada por Biden en el debate del pasado jueves. Acusó a McCain de ofrecer un crédito fiscal de 5,000 dólares con una mano, y subir los impuestos con la otra, en referencia a las conclusiones del Kaiser Family Foundation que decía que el coste medio del plan sanitario para cada familia sería de 12,680 dólares.
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