El primer voto no será emitido hasta el próximo mes de enero, pero la primera competición en el largo camino hacia la Casa Blanca termina este fin de semana. Es la competición en la que los americanos votan con su bolsillo, y en la que los diferentes aspirantes han recorrido el país para recaudar todo el dinero posible para que el reporte sobre recaudación de fondos relativo a los 3 primeros meses del año confirme su fortaleza y no evidencie su debilidad. Hoy se cierra el plazo para el primer reporte. 31 de marzo.
Es campaña dentro de la campaña. Las cifras que se emitan nos darán una idea sobre la sostenibilidad de las diferentes candidaturas. Unas cifras mayores de las esperadas podrían hacer que un candidato sea considerado con más seriedad y atención por parte de votantes y prensa, lo cual contribuiría a acelerar su capacidad de recaudar dinero en los próximos meses. El dinero atrae al dinero.
En cambio, una recaudación de fondos menor de lo esperada, generaría importantes dudas sobre la viabilidad de una candidatura que hasta ahora pudiera haber parecido potente. Esto alejaría a los donantes de esa candidatura y condicionaría de forma fatal su futura capacidad de recaudación.
Los candidatos tienen hasta el próximo 15 de abril para presentar las cifras correspondientes hasta el día de hoy ante la Federal Election Commission.
sábado, 31 de marzo de 2007
Más mierda sobre McCain
Esta vez es The Hill. Publicó ayer informaciones según las cuales el Senador John McCain estuvo coqueteando con abandonar el Partido Republicano en 2001. Recordar que ese año se produjo la célebre deserción del Senador Jim Jeffords, quien dejó el caucus republicano para volverse independiente. Esto hizo que los demócratas recuperasen la mayoría de la cámara.
En aquellos meses iniciales de 2001, el caucus demócrata tentó tanto a Jeffords como al Senador Lincoln Chafee (R - Rhode Island) para que dejaran tirado a su partido. Chafee no accedió, Jeffords sí lo hizo. Ahora nos cuentan que también hubo conversaciones con McCain, pero que estas, a diferencia de las otras, no fueron iniciadas por los líderes demócratas, sino que fue la propia gente de McCain la que se acercó a ellos para plantearles el caso.
Según estas informaciones, el responsable habría sido John Weaver, el que fuera su jefe de campaña en 2000 y quien tuvo sonados enfrentamientos con Karl Rove en aquella época. The Hill cita como fuentes al ex Senador Tom Dashle y el ex Congresista Tom Downey. Esto podría ser cierto o no. Podría ser una exageración de la realidad. Si fuera cierto McCain se encontraría con un problemón. Aunque siempre le quedará el recurso fácil de decir que Weaver actuó sin su conocimiento. Pero conociendo a McCain, es poco probable que permita que Weaver se coma el marrón.
En aquellos meses iniciales de 2001, el caucus demócrata tentó tanto a Jeffords como al Senador Lincoln Chafee (R - Rhode Island) para que dejaran tirado a su partido. Chafee no accedió, Jeffords sí lo hizo. Ahora nos cuentan que también hubo conversaciones con McCain, pero que estas, a diferencia de las otras, no fueron iniciadas por los líderes demócratas, sino que fue la propia gente de McCain la que se acercó a ellos para plantearles el caso.
Según estas informaciones, el responsable habría sido John Weaver, el que fuera su jefe de campaña en 2000 y quien tuvo sonados enfrentamientos con Karl Rove en aquella época. The Hill cita como fuentes al ex Senador Tom Dashle y el ex Congresista Tom Downey. Esto podría ser cierto o no. Podría ser una exageración de la realidad. Si fuera cierto McCain se encontraría con un problemón. Aunque siempre le quedará el recurso fácil de decir que Weaver actuó sin su conocimiento. Pero conociendo a McCain, es poco probable que permita que Weaver se coma el marrón.
jueves, 29 de marzo de 2007
Draft Thompson
He tenido estos tres últimos días a mi ayudante Peru Hornblower investigando sobre Fred Thompson. El ex Senador y actor, vivió durante décadas en Nashville, mientras se dedicaba a la práctica privada de la abogacía. Por lo que aquí es muy conocido y querido. La gente está expectante por saber si finalmente se presentará o no a la Presidencia.
Todas las encuestas parecen decirle preséntate. Cada vez que su nombre es incluido en la terna de aspirantes republicanos, logra porcentajes de apoyo de dos dígitos. Sin haber hecho campaña. Meritorio. En una encuesta publicada por Rasmussen en los últimos días, se señalaba que Thompson derrotaría a Hillary Clinton en un hipotético enfrentamiento entre ambos en noviembre de 2008.
Mirando esos números es comprensible la expectación. Peru ha averiguado que su hijo Fred D. "Tony" Thompson Jr. vive aquí en Nashville, donde ejerce de abogado y lobbysta legislativo. En cambio su padre no se prodiga mucho últimamente por Tennessee. Tenía una casa con su actual mujer en Hendersonville, que vendieron recientemente. Hoy en día residen en McLean, Virginia, ya que ese lugar les pilla más cerca de sus trabajos.
Es previsible que, en caso de presentar su candidatura para la Casa Blanca, vuelva a establecerse en Tennessee, por lo que le he dicho a Peru que esté atento por si hay algún movimiento en este sentido. Sería una señal inequívoca de que ha tomado la decisión de presentarse. Utilizaremos esa vía para interpretar sus intenciones reales. Nos ayudará Ferdinand Malaxetxebarria, un vasco, nieto de pescadores de Lekeitio, que trabaja en los registros administrativos del gobierno estatal.
También seguiremos sus movimientos en los centros de poder de Washington, a través de gente como Mary Ann Akers de The Sleuth, que informaba hace un par de días de un encuentro de Fred Thompson con el ex presidente del Partido Republicano Ed Gillespie en el Hotel Mayflower, situado en el 1127 Connecticut Avenue Northwest. Podría haber sido un encuentro entre dos amigos o algo más que eso. Es lo que no sabremos.
Lo que sí sabemos es que nuestros congresistas Jimmy Duncan y Zach Wamp, que apoyan al candidatura de Mitt Romney, andan diciendo por ahí que en caso de que Thompson entrara en la carrera, ellos se pasarían sin dudarlo a apoyarle. De hecho han participado, junto con otros republcianos de Tennessee, en todo el movimiento Draft Thompson que ha surgido en las últimas semanas.
Todas las encuestas parecen decirle preséntate. Cada vez que su nombre es incluido en la terna de aspirantes republicanos, logra porcentajes de apoyo de dos dígitos. Sin haber hecho campaña. Meritorio. En una encuesta publicada por Rasmussen en los últimos días, se señalaba que Thompson derrotaría a Hillary Clinton en un hipotético enfrentamiento entre ambos en noviembre de 2008.
Mirando esos números es comprensible la expectación. Peru ha averiguado que su hijo Fred D. "Tony" Thompson Jr. vive aquí en Nashville, donde ejerce de abogado y lobbysta legislativo. En cambio su padre no se prodiga mucho últimamente por Tennessee. Tenía una casa con su actual mujer en Hendersonville, que vendieron recientemente. Hoy en día residen en McLean, Virginia, ya que ese lugar les pilla más cerca de sus trabajos.
Es previsible que, en caso de presentar su candidatura para la Casa Blanca, vuelva a establecerse en Tennessee, por lo que le he dicho a Peru que esté atento por si hay algún movimiento en este sentido. Sería una señal inequívoca de que ha tomado la decisión de presentarse. Utilizaremos esa vía para interpretar sus intenciones reales. Nos ayudará Ferdinand Malaxetxebarria, un vasco, nieto de pescadores de Lekeitio, que trabaja en los registros administrativos del gobierno estatal.
También seguiremos sus movimientos en los centros de poder de Washington, a través de gente como Mary Ann Akers de The Sleuth, que informaba hace un par de días de un encuentro de Fred Thompson con el ex presidente del Partido Republicano Ed Gillespie en el Hotel Mayflower, situado en el 1127 Connecticut Avenue Northwest. Podría haber sido un encuentro entre dos amigos o algo más que eso. Es lo que no sabremos.
Lo que sí sabemos es que nuestros congresistas Jimmy Duncan y Zach Wamp, que apoyan al candidatura de Mitt Romney, andan diciendo por ahí que en caso de que Thompson entrara en la carrera, ellos se pasarían sin dudarlo a apoyarle. De hecho han participado, junto con otros republcianos de Tennessee, en todo el movimiento Draft Thompson que ha surgido en las últimas semanas.
miércoles, 28 de marzo de 2007
Los negativos de Hillary
Hillary tiene mucho trabajo por delante. Asegurar la nominación de su partido puede ser un juego de niños, comparado con lo que le espera para lograr agradar y convencer al votante medio de que es una persona en la que se puede confiar. The Harris Poll nos cuenta en su último sondeo que un 50% de los estadounidenses en edad de votar, dicen desde ahora que no votarían a Hillary si fuese la candidata del Partido Demócrata. Esto sin que todavía haya hecho ni dicho realmente nada polémico.
Los números de la Senadora parecen ser mejores -lo de mejores es un decir- cuando la muestra se limita al sector de votantes que se declaran independientes. Entre los independientes no es un 50% el que no votaría por ella. Es un 48%.... sí, un 48% de los independientes dicen que no la votarían, frente a un 37% de independientes que dicen que la votarían.
Los números de la Senadora parecen ser mejores -lo de mejores es un decir- cuando la muestra se limita al sector de votantes que se declaran independientes. Entre los independientes no es un 50% el que no votaría por ella. Es un 48%.... sí, un 48% de los independientes dicen que no la votarían, frente a un 37% de independientes que dicen que la votarían.
Hay más.
While one would expect that women would be more likely than men to lean towards Senator Clinton, this is not the case as 38 percent of women and 34 percent of men both say they would vote for her. Even among women there is a divide as four in 10 (41%) single women say they would vote for Senator Clinton, compared to 36 percent of married women. Over half of both men (56%) and married women (52%) say they would not vote for her for president. (...)
Besides her track records and politics, there are other reasons why so many people do not like Senator Clinton. Fully half (52%) agree that she does not appear to connect with people on a personal level, and this number is even higher among married women (53%), men (56%), Matures (68%), and, of course, Republicans (73%). This may be her big problem. (...)
A Hillary le esperan dos años muy largos.
George Bushies vs. Jeb Bushies
Nada más llegar esta mañana, mi ayudante Peru Hornblower me ha mostrado un interesante artículo que publicó ayer Alexander Bolton en The Hill. Su título es Bush family hedges its bets for 2008. Lo que nos dice es que la mayoría de operativos de campaña que trabajaron para el actual Presidente George W. Bush, están ahora ocupando posiciones alrededor de John McCain. Mientras que los antiguos colaboradores del ex Gobernador de Florida Jeb Bush, se están integrando en la maquinaria electoral de Mitt Romney.
Hay excepciones. Matt Rhoades y Kevin Madden pertenecen al entorno del Presidente y ahora van con Romney. Y Kathleen Shanahan, que fuera jefa de gabinete de Jeb Bush, va con McCain. Pero son la excepción que confirma la regla. Lo que apunta Bolton es cierto. La mayoría de protegidos de Karl Rove trabajarán para John McCain, y aquella gente cercana a Jeb Bush, tan cercana que es impensable que decidieran colaborar en una campaña sin saber que su antiguo jefe lo aprueba, ha optado por Romney proporcionándole una potente organización para la importante primaria de Florida.
Algunos pensarán que los hermanos Bush no logran ponerse de acuerdo a la hora de apoyar a un candidato. Otros en cambio pensarán que todo forma parte de una estrategia general de la familia para tener activos en las dos campañas, y mantener su influencia gane uno o gane otro... o colocar al hermano menor en la vicepresidencia. Lo que desactivaría esta última teoría es que un candidato con posibilidades reales de ganar, Rudy Giuliani, quede fuera del juego.
Hay excepciones. Matt Rhoades y Kevin Madden pertenecen al entorno del Presidente y ahora van con Romney. Y Kathleen Shanahan, que fuera jefa de gabinete de Jeb Bush, va con McCain. Pero son la excepción que confirma la regla. Lo que apunta Bolton es cierto. La mayoría de protegidos de Karl Rove trabajarán para John McCain, y aquella gente cercana a Jeb Bush, tan cercana que es impensable que decidieran colaborar en una campaña sin saber que su antiguo jefe lo aprueba, ha optado por Romney proporcionándole una potente organización para la importante primaria de Florida.
Algunos pensarán que los hermanos Bush no logran ponerse de acuerdo a la hora de apoyar a un candidato. Otros en cambio pensarán que todo forma parte de una estrategia general de la familia para tener activos en las dos campañas, y mantener su influencia gane uno o gane otro... o colocar al hermano menor en la vicepresidencia. Lo que desactivaría esta última teoría es que un candidato con posibilidades reales de ganar, Rudy Giuliani, quede fuera del juego.
martes, 27 de marzo de 2007
All Style and Little Substance
El Washington Post se hace una pregunta inevitable sobre la candidatura de Barack Obama. Is Obama All Style and Little Substance? "Good Feeling" lo llamo yo. Ese podría ser el lema de su campaña. No profundiza en las cuestiones de interés, y cada vez que le lanzan alguna pregunta sobre sus planes para enfrentar las preocupacioens ciudadanas del día a día, echa balones fuera. Generalmente sale airoso gracias a su innegable magnetismo y talento para dirigirse a las personas, pero puede llegar un momento en que el efecto de su carisma no le sea suficiente.
Hasta ahora su único mensaje parece ser el "sé que os encanta mi personalidad, votarme y en los próximos cuatro años gozaréis de mi cara y mi voz cada día por televisión". Quiere que el Despacho Oval sea como el plató de esa serie de televisión que todos enchufamos cada vez que volvemos a casa de trabajar. De los productores de "La hora de Bill Cosby"... llega a sus pantallas "La hora de Barack Obama".Yo siempre pensé que la gran esperanza "negra" del Partido Demócrata era Harold Ford. Un demócrata afroamericano, joven pero experimentado, con amplia experiencia en la Cámara de Representantes y reconocido centrista. Actual presidente del Democratic Leadership Council. El pasado año existían muchas esperanzas en el joven Ford aquí en Tennessee. Después de ser durante varias legislaturas congresista federal, representando a Memphis, dio el valiente paso de renunciar a su escaño para presentarse al Senado en una carrera incierta.
Finalmente perdió la carrera. Pero pareció tener posibilidades reales de convertirse en el primer senador negro elegido por un estado del Sur profundo. Esa sí que hubiera sido una experiencia rompedora. Un negro representando después de tanto tiempo a todo un antiguo estado confederado en Washington. Con puntos de vista conservadores en temas como el control de armas o los derechos de los estados. Un punto de partido inmejorable para aspirar a metas más altas. Pero no podrá ser. Al menos de momento.
El "efecto celebridad" de Fred Thompson
En el lado republicano tenemos nuevos números para Iowa y New Hampshire. En los últimos meses hemos observado cómo la ventaja de Giuliani sobre McCain se ha ampliado a nivel nacional. Pero de los últimos sondeos del American Research Group se desprende que en los dos estados que marcarán tendencia la cosa está extremadamente igualada.
En Iowa (ver sondeo), donde McCain nunca tuvo buenos números debido a su decisión del año 2000 de no competir allí, algo que fue muy mal visto por los votantes del estado, aparece empatado con Rudy Giuliani en un 29%. Romney se queda con un 10%.
En New Hampshire (ver sondeo), en febrero Giuliani aparecía con un 27% frente a un 26% de McCain, empate técnico. Ahora es McCain el que se coloca por delante de Giuliani, aunque los dos parecen haber perdido apoyos. McCain logra un 23% frente a un 19% de Rudy. Mitt Romney les pisa los talones con un 17%.
La variación más dramática la tenemos en New Hampshire. Puede deberse a dos factores. Por una parte está el hecho de que el Senador McCain ha visitado varias veces el estado en las últimas semanas y esto ha estimulado sus posibilidades. Sin olvidar también que ya en 2000 McCain arrasó en ese estado, por lo que debe tener una organización de campaña mejor preparada que el de sus rivales.
Por otra parte, hay un segundo factor que no debe pasar desapercibido. Estos sondeos han incluído por primera vez al ex Senador Fred Thompson como posible candidato. Y este logra ya en estas primeras encuestas, y sin hacer campaña, cifras de dos dígitos en ambos estados. Un 12% en Iowa y un 11% en New Hampshire. Porcentajes que parece robar a Giuliani. Es curioso porque se daba por hecho que la entrada del actor en la carrera perjudicaría a Romney. Pero no es así. Esta encuesta indica que perjudicaría a Rudy Giuliani. Puede ser lo que algunos llaman "efecto celebridad".
En Iowa (ver sondeo), donde McCain nunca tuvo buenos números debido a su decisión del año 2000 de no competir allí, algo que fue muy mal visto por los votantes del estado, aparece empatado con Rudy Giuliani en un 29%. Romney se queda con un 10%.
En New Hampshire (ver sondeo), en febrero Giuliani aparecía con un 27% frente a un 26% de McCain, empate técnico. Ahora es McCain el que se coloca por delante de Giuliani, aunque los dos parecen haber perdido apoyos. McCain logra un 23% frente a un 19% de Rudy. Mitt Romney les pisa los talones con un 17%.
La variación más dramática la tenemos en New Hampshire. Puede deberse a dos factores. Por una parte está el hecho de que el Senador McCain ha visitado varias veces el estado en las últimas semanas y esto ha estimulado sus posibilidades. Sin olvidar también que ya en 2000 McCain arrasó en ese estado, por lo que debe tener una organización de campaña mejor preparada que el de sus rivales.
Por otra parte, hay un segundo factor que no debe pasar desapercibido. Estos sondeos han incluído por primera vez al ex Senador Fred Thompson como posible candidato. Y este logra ya en estas primeras encuestas, y sin hacer campaña, cifras de dos dígitos en ambos estados. Un 12% en Iowa y un 11% en New Hampshire. Porcentajes que parece robar a Giuliani. Es curioso porque se daba por hecho que la entrada del actor en la carrera perjudicaría a Romney. Pero no es así. Esta encuesta indica que perjudicaría a Rudy Giuliani. Puede ser lo que algunos llaman "efecto celebridad".
lunes, 26 de marzo de 2007
No tienen nada en común
Hace unos días al Senador John McCain, de visita en New Hampshire, le preguntaron por qué había rechazado una invitación del Club For Growth para asistir a su reunión anual. "No estoy seguro de si el Club For Growth y yo tenemos algo en común", fue la respuesta del senador. McCain culpó directamente a esta organización de que los republicanos hubieran perdido la mayoría en el Senado, por la campaña que montaron en contra del senador RINO (Republican In Name Only) Lincoln Chafee.
La respuesta del Club For Growth no se ha hecho esperar. Ha llegado en forma de comercial. McCain se ha buscado un enemigo terrible.
La respuesta del Club For Growth no se ha hecho esperar. Ha llegado en forma de comercial. McCain se ha buscado un enemigo terrible.
sábado, 24 de marzo de 2007
Dos apuntes antes del Grand Ole Opry
Ha amanecido hoy un bonito sábado. Aquí esta mañana sólo se habla del certamen de Miss America que se celebró ayer. La ganadora resultó ser la representante de Tennessee y esto se está celebrando en Nashville como un reconocimiento a la belleza característica de este estado sin igual. Veo a la gente contenta. Algunos ya consideran a Rachel Smith la Tennessiana más importante desde el Presidente Andrew Johnson. Yo creo que exageran un poco, aunque viendo la reacción de los vascos cuando una vasca ganó Operación Triunfo, a mí ya nada me sorprende.
Hoy es el cumpleaños de mi cuñado Ury. Ury de Uriel. Le pusieron el nombre en honor al Arcangel que está en las puertas de las tierras y los templos de Dios para evitar que el mal las penetre. Para celebrarlo nos ha regalado entradas para al Grand Ole Opry, que, como sabréis, se celebra todos los sábados por la noche en Nashville desde 1925. Es un programa de música country que se emite en directo desde la estación de radio WSM. Me gusta. Lo pasaremos bien.
Antes de enfrentar este día tan ocioso, voy a hacer un par de comentarios sobre la campaña electoral, acompañados de dos documentos audiovisuales. Por una parte, comentar que la Senadora Hillary Clinton ya ha comenzado a utilizar de forma descarada la imagen de su marido el ex Presidente. Esta le ha dicho a Bill que grabe un video para pedir a sus seguidores que contribuyan económicamente a la campaña antes de que se cierre el plazo de los tres primeros meses del año y se den a conocer alas cifras de recaudación de los candidatos en ese periodo. Aquí podéis ver el video.
El ex Gobernador Mitt Romney (R - Massachusetts) por su parte, anda obligando grabar mensajes de video a todos aquellos miembros del Congreso que han anunciado públicamente que lo apoyan. Entre ellos el antiguo Speaker Dennis Hastert, el Senador Bob Bennett, el Senador Orrin Hatch, y un largo etcétera. Aunque entre todos ellos yo destacaría al Senador Jim DeMint, por su importancia estratégica. Senador por Carolina del Sur, el primer estado sureño que albergará primarias. Carolina del Sur fue el estado clave en las internas republicanas del 2000 y puede serlo en 2008. Aquí el video de DeMint apoyando a Romney.
John McCain tiene el apoyo indisimulado del otro Senador del Estado, Lindsay Graham, y del gobernador Mark Sanford -aunque este último no se haya pronunciado-. El movimiento de DeMint es importante porque supone un espaldarazo a Romney ante las bases del partido por parte del político más conservador de Carolina del Sur -DeMint está en el Top-5 de miembros más derechistas del Senado-.
Es muy interesante este desacuerdo entre las figuras republicanas de Carolina del Sur a la hora de apoyar a uno u otro candidato. Es interesante porque por primera vez en mucho tiempo eso ocurre en ese estado. En teoría el Gobernador Mark Sanford debería ser el auténtico "kingmaker" para los republicanos, pero es un gobernador que está enfrentado con el establishment del Partido Republicano de Carolina del Sur y puede que no tenga demasiado control sobre el voto republicano en las primarias.
Esto contrasta con el escenario que teníamos en pasadas elecciones. Había un claro "kingmaker" en la política republicana de Carolina del Sur. El antiguo Gobernador Carroll Campbell, uno de los políticos más brillantes del Sur moderno, que con su decisivo apoyo dio la victoria en ese estado a todos los candidatos que apoyó en diferentes elecciones presidenciales, desde Reagan hasta Bush en 2000.
Como escribió Jonathan Martin en el Opinion Journal el pasado mes de septiembre:
"Since 1980, no Republican presidential candidate has won the nomination without winning the South Carolina primary. And in every contested nomination battle since that time, the man who delivered those winning Republican votes was Carroll Campbell. A Greenville-area Congressman in 1980, Campbell and his young protégé Lee Atwater spurned Strom Thurmond’s preferred candidate to run Ronald Reagan’s South Carolina campaign.
Eight years later, as governor, he and Atwater engineered the Palmetto State effort for Reagan’s vice-president, securing a victory for George H. W. Bush over Bob Dole (again, Thurmond’s preferred candidate). When Bush was challenged from the right by Pat Buchanan in 1992, the Campbell organization was there again. Facing another Buchanan insurgency four years later, Campbell, by this point a Washington insurance lobbyist, patched things up with Dole to deliver another much-needed primary victory — a win so impressive as to get Campbell on Dole’s vice-presidential short list.
In 2000 there was little doubt whom Campbell and his friends would get behind. The Campbells and the Bushs were like family. And once again, he came through with a must-have victory, stopping the bleeding from another Bush loss in New Hampshire.
A year later, the architect of the modern South Carolina Republican party was diagnosed with Alzheimer’s at 61."
Hoy es el cumpleaños de mi cuñado Ury. Ury de Uriel. Le pusieron el nombre en honor al Arcangel que está en las puertas de las tierras y los templos de Dios para evitar que el mal las penetre. Para celebrarlo nos ha regalado entradas para al Grand Ole Opry, que, como sabréis, se celebra todos los sábados por la noche en Nashville desde 1925. Es un programa de música country que se emite en directo desde la estación de radio WSM. Me gusta. Lo pasaremos bien.
Antes de enfrentar este día tan ocioso, voy a hacer un par de comentarios sobre la campaña electoral, acompañados de dos documentos audiovisuales. Por una parte, comentar que la Senadora Hillary Clinton ya ha comenzado a utilizar de forma descarada la imagen de su marido el ex Presidente. Esta le ha dicho a Bill que grabe un video para pedir a sus seguidores que contribuyan económicamente a la campaña antes de que se cierre el plazo de los tres primeros meses del año y se den a conocer alas cifras de recaudación de los candidatos en ese periodo. Aquí podéis ver el video.
El ex Gobernador Mitt Romney (R - Massachusetts) por su parte, anda obligando grabar mensajes de video a todos aquellos miembros del Congreso que han anunciado públicamente que lo apoyan. Entre ellos el antiguo Speaker Dennis Hastert, el Senador Bob Bennett, el Senador Orrin Hatch, y un largo etcétera. Aunque entre todos ellos yo destacaría al Senador Jim DeMint, por su importancia estratégica. Senador por Carolina del Sur, el primer estado sureño que albergará primarias. Carolina del Sur fue el estado clave en las internas republicanas del 2000 y puede serlo en 2008. Aquí el video de DeMint apoyando a Romney.
John McCain tiene el apoyo indisimulado del otro Senador del Estado, Lindsay Graham, y del gobernador Mark Sanford -aunque este último no se haya pronunciado-. El movimiento de DeMint es importante porque supone un espaldarazo a Romney ante las bases del partido por parte del político más conservador de Carolina del Sur -DeMint está en el Top-5 de miembros más derechistas del Senado-.
Es muy interesante este desacuerdo entre las figuras republicanas de Carolina del Sur a la hora de apoyar a uno u otro candidato. Es interesante porque por primera vez en mucho tiempo eso ocurre en ese estado. En teoría el Gobernador Mark Sanford debería ser el auténtico "kingmaker" para los republicanos, pero es un gobernador que está enfrentado con el establishment del Partido Republicano de Carolina del Sur y puede que no tenga demasiado control sobre el voto republicano en las primarias.
Esto contrasta con el escenario que teníamos en pasadas elecciones. Había un claro "kingmaker" en la política republicana de Carolina del Sur. El antiguo Gobernador Carroll Campbell, uno de los políticos más brillantes del Sur moderno, que con su decisivo apoyo dio la victoria en ese estado a todos los candidatos que apoyó en diferentes elecciones presidenciales, desde Reagan hasta Bush en 2000.
Como escribió Jonathan Martin en el Opinion Journal el pasado mes de septiembre:
"Since 1980, no Republican presidential candidate has won the nomination without winning the South Carolina primary. And in every contested nomination battle since that time, the man who delivered those winning Republican votes was Carroll Campbell. A Greenville-area Congressman in 1980, Campbell and his young protégé Lee Atwater spurned Strom Thurmond’s preferred candidate to run Ronald Reagan’s South Carolina campaign.
Eight years later, as governor, he and Atwater engineered the Palmetto State effort for Reagan’s vice-president, securing a victory for George H. W. Bush over Bob Dole (again, Thurmond’s preferred candidate). When Bush was challenged from the right by Pat Buchanan in 1992, the Campbell organization was there again. Facing another Buchanan insurgency four years later, Campbell, by this point a Washington insurance lobbyist, patched things up with Dole to deliver another much-needed primary victory — a win so impressive as to get Campbell on Dole’s vice-presidential short list.
In 2000 there was little doubt whom Campbell and his friends would get behind. The Campbells and the Bushs were like family. And once again, he came through with a must-have victory, stopping the bleeding from another Bush loss in New Hampshire.
A year later, the architect of the modern South Carolina Republican party was diagnosed with Alzheimer’s at 61."
viernes, 23 de marzo de 2007
Team McCain
Ya volví a Nashville después de asistir al show de Edwards. Me he traído todo tipo de dulces y comida típicos de Carolina del Norte. He traído por ejemplo una paleta de cerdo, que allí dicen hacerlo mejor que en otros lugares. Allí todo lo basan en el gusto por la larga espera ante el carbón. La verdadera barbacoa. Me lo tomaré esta noche con alguien que me dirá que eso engorda y que no quiere tomarlo. Pero aunque sea un poco tenemos que probarlo. Pero antes de eso toca hablar del candidato que me queda para cerrar la lista de los seis más potentes.
John McCain. El que hace pocos meses era el claro front-runner entre los republicanos. Durante 2006 organizó y participó en 346 eventos, en los que reunió más de 10,5 millones de dólares para las campañas electorales de diversos candidatos republicanos. Lo cual le garantiza un firme apoyo entre otros senadores y representantes de su partido a los que ayudó.
Todo esto le permitía lanzarse esta vez como un insider dentro del aparato partidista y contar con poderosas redes de apoyo financiero. Para ello incorporó a varios operativos de campaña que trabajaron para Bush, formando el equipo más experimentado en campañas electorales de todos los que estamos viendo.
Pero ha decidido llevar una campaña de muy bajo perfil en estos primeros meses del año. Tomando decisiones difíciles de entender para muchos. La no asistencia a la convención anual del Conservative Political Action Committee (CPAC), o su ausencia en la reunión del Club For Growth al que fue invitado igual que el resto de candidatos del GOP.
Todo esto pueden ser síntomas que nos indican que John McCain no se siente cómodo en el papel de insider. Movimientos encaminados a evitar convertirse para los republicanos lo que Hillary es para los demócratas en estas elecciones. El candidato de la élite. El candidato formal. Durante sus dos décadas de servicio en el Senado, McCain se ha ganado una imagen de rebelde indomable que ha sido el secreto de su inmensa popularidad como figura nacional. No es de extrañar pues, que exista el miedo a echar a perder ese aura si la campaña más importante de su vida la hace jugando un papel que no concuerda con su espíritu de maverick.
Conociendo su carácter, me atrevería a decir que puede llegar a sentirse indigno si contradice ese espíritu. No quiere que los norteamericanos piensen desde ahora que él es el candidato inevitable de los republicanos. Necesita ser combativo y ganar compitiendo. Buscaría el llamado "efecto underdog", es decir, el del candidato que parece desamparado, y que encuentra en la superación de las expectativas la fuerza que necesita para que el votante se termine decidiendo por él.
Considerando la enorme experiencia de sus operativos de campaña, es impensable que la aparente depresión de su candidatura en los últimos meses sea consecuencia de la incapacidad o la mala planificación. Yo diría que están organizando una estrategia que busca que el votante identifique al McCain de 2008 con el McCain de 2000. Aquel entusiasta insurgente desconocido que inesperadamente surgió en la carrera y causó sensación poniendo en apuros la poderosa maquinaria del Gobernador Bush. Con ocho años más, y sin contar esta vez con el efecto novedad o sorpresa, está buscando la manera de generar igual entusiasmo.
Para buscar ese éxito, contrató como campaign manager a todo un experto. Terry Nelson. Natural de Iowa, su nombre se escuchó por primera vez siendo muy joven en 1992, cuando dirigió la campaña del republicano Jim Nussle al Congreso, dos años antes de graduarse en la universidad. En 2000 entró en el National Republican Congressional Committee como director político, y a partir de 2002 fue subjefe de gabinete del presidente del Partido Republicano. En julio de 2003 fue nombrado director político nacional de la campaña Bush-Cheney 2004.
En 2001 fundó la firma de comunicaciones Dawson McCarthy Nelson Media, y en 2005 co-fundó el Crosslink Strategy Group, con otros socios relacionados con la creación de los anuncios de los Swift Boat Veterans for Truth en 2004. El Senador McCain lo fichó a principios de 2006 para su comité de acción política Straight Talk America.
John Weaver, el que fuera su director de campaña en el año 2000, esta vez tendrá el cargo de "chief political strategist". En el año 2000 John Weaver estuvo en la lista negra de Karl Rove durante las primarias republicanas. La guerra entre las campañas de Bush y McCain fue tan enconada, que, después de las elecciones, Weaver fue marginado y condenado al ostracismo por toda organización relacionada directa o indirectamente con el Partido Republicano. Incluso llegó a trabajar para algunosos demócratas, hasta que en 2004 llegó a un acuerdo con Rove para que McCain apoyara la reelección de Bush a cambio de reinsertar a su gente en el establishment del partido.
Michael Dennehy será el director político nacional. Esto supone un paso adelante en su carrera. Será su primera campaña nacional. Hasta ahora sólo había operado en New Hampshire. En el año 2000, Dennehy fue el artífice de la sensacional victoria de McCain en las primarias de New Hampshire, donde derrotó al favorito Bush por más de 15 puntos de ventaja. Esta vez operará sorbe los 50 estados.
Rick Davis será el "chairman" de la campaña. Supervisará la recaudación de fondos y el desarrollo del prorgama político. Ya tuvo el mismo papel en 2000. Carla Eudy será la "top fundraiser". Es una mujer de confianza del poderoso ex senador texano Phil Gramm. Texas es el segundo estado del que más dinero sale para campañas electorales.
El fichaje más destacado del equipo de McCain es el de Mark McKinnon, un genio de la publicidad por televisión que trabajó para Bush en 2004. Los servicios de McKinnon han sido muy codiciados por muchos candidatos, pero McCain se ha llevado el gato al agua. Más de la mitad del dinero gastado por Bush-Cheney en publicidad en 2004, fue a parar a la firma Maverick Media, propiedad de McKinnon. Uno de sus anuncios más conocidos fue el llamado "Windsurfing", que ridiculizaba los cambios de postura de John Kerry.
"McKinnon launched his career as a Democratic campaign consultant, then dropped out of politics to work for corporate clients. But the Austin, Texas, image consultant was lured back into politics by his close friend George W. Bush, this time as a Republican strategist", escribía Bill McConnell el 27 de junio de 2005 en Broadcasting & Cable.
Brian Jones, hasta hace poco director de comunicaciones del Comité Nacional Republicano, es ahora el director de comunicaciones de McCain 2008. El hispano Danny Diaz será su número dos. Hasta ahora ha sido jefe de comunicaciones regional en el RNC. Mark Slater será el redactor de discursos del senador. Slater ha sido todos estos años jefe de gabinete de McCain en el Senado.
El encargado de los sondeos de opinión será Bill McIntruff, quien ya ocupó la misma posición en la campaña presidencial de McCain en 2000. Lo acompañará Lance Tarrance, un estratega bien conocido en la vieja escuela de toda la vida en el GOP.
Steve Schmidt será "senior adviser", centrándose sobre todo en el desarrollo del mensaje del candidato. Schmidt es otra de las más notables incorporaciones que ha hecho McCain a su equipo. Protegido de Karl Rove, es uno de los más brillantes y jóvenes consultores políticos del país. Siempre se movió en el círculo cercano a Bush, ejerciendo como portavoz del Vicepresidente Dick Cheney en el primer mandato, y en 2005 participó en el proceso de selección de jueces para el Tribunal Supremo.
El año pasado fue contratado por el Gobernador Arnold Schwarzenegger para manejar su campaña de reelección. Tras este éxito en California, sus servicios fueron pretendidos por diferentes aspirantes presidenciales.
Otro que trabajó para el Gobernador Schwarzenegger en 2006 es Matt David. Él será el encargado de la unidad de respuesta rápida de la campaña presidencial de John McCain. En la campaña de reelección de Schwarzenegger tuvo esa misma función. Fred Davis, supervisor de la publicidad televisiva de Arnold en California, trabajará como consultor creativo para McCain.
Como asesores para asuntos de política doméstica y política inernacional contará con el ex senador Phil Gramm (R - Texas), antiguo presidente del Comité de Finanzas del Senado; y Robert Zoelick, ex Secretario de Estado Adjunto, y antiguo representante comercial de EEUU.
También cuenta ya con importantes asesores en algunos de los primeros estados que albergarán elecciones primarias el año que viene:
John McCain. El que hace pocos meses era el claro front-runner entre los republicanos. Durante 2006 organizó y participó en 346 eventos, en los que reunió más de 10,5 millones de dólares para las campañas electorales de diversos candidatos republicanos. Lo cual le garantiza un firme apoyo entre otros senadores y representantes de su partido a los que ayudó.
Todo esto le permitía lanzarse esta vez como un insider dentro del aparato partidista y contar con poderosas redes de apoyo financiero. Para ello incorporó a varios operativos de campaña que trabajaron para Bush, formando el equipo más experimentado en campañas electorales de todos los que estamos viendo.
Pero ha decidido llevar una campaña de muy bajo perfil en estos primeros meses del año. Tomando decisiones difíciles de entender para muchos. La no asistencia a la convención anual del Conservative Political Action Committee (CPAC), o su ausencia en la reunión del Club For Growth al que fue invitado igual que el resto de candidatos del GOP.
Todo esto pueden ser síntomas que nos indican que John McCain no se siente cómodo en el papel de insider. Movimientos encaminados a evitar convertirse para los republicanos lo que Hillary es para los demócratas en estas elecciones. El candidato de la élite. El candidato formal. Durante sus dos décadas de servicio en el Senado, McCain se ha ganado una imagen de rebelde indomable que ha sido el secreto de su inmensa popularidad como figura nacional. No es de extrañar pues, que exista el miedo a echar a perder ese aura si la campaña más importante de su vida la hace jugando un papel que no concuerda con su espíritu de maverick.
Conociendo su carácter, me atrevería a decir que puede llegar a sentirse indigno si contradice ese espíritu. No quiere que los norteamericanos piensen desde ahora que él es el candidato inevitable de los republicanos. Necesita ser combativo y ganar compitiendo. Buscaría el llamado "efecto underdog", es decir, el del candidato que parece desamparado, y que encuentra en la superación de las expectativas la fuerza que necesita para que el votante se termine decidiendo por él.
Considerando la enorme experiencia de sus operativos de campaña, es impensable que la aparente depresión de su candidatura en los últimos meses sea consecuencia de la incapacidad o la mala planificación. Yo diría que están organizando una estrategia que busca que el votante identifique al McCain de 2008 con el McCain de 2000. Aquel entusiasta insurgente desconocido que inesperadamente surgió en la carrera y causó sensación poniendo en apuros la poderosa maquinaria del Gobernador Bush. Con ocho años más, y sin contar esta vez con el efecto novedad o sorpresa, está buscando la manera de generar igual entusiasmo.
Para buscar ese éxito, contrató como campaign manager a todo un experto. Terry Nelson. Natural de Iowa, su nombre se escuchó por primera vez siendo muy joven en 1992, cuando dirigió la campaña del republicano Jim Nussle al Congreso, dos años antes de graduarse en la universidad. En 2000 entró en el National Republican Congressional Committee como director político, y a partir de 2002 fue subjefe de gabinete del presidente del Partido Republicano. En julio de 2003 fue nombrado director político nacional de la campaña Bush-Cheney 2004.
En 2001 fundó la firma de comunicaciones Dawson McCarthy Nelson Media, y en 2005 co-fundó el Crosslink Strategy Group, con otros socios relacionados con la creación de los anuncios de los Swift Boat Veterans for Truth en 2004. El Senador McCain lo fichó a principios de 2006 para su comité de acción política Straight Talk America.
John Weaver, el que fuera su director de campaña en el año 2000, esta vez tendrá el cargo de "chief political strategist". En el año 2000 John Weaver estuvo en la lista negra de Karl Rove durante las primarias republicanas. La guerra entre las campañas de Bush y McCain fue tan enconada, que, después de las elecciones, Weaver fue marginado y condenado al ostracismo por toda organización relacionada directa o indirectamente con el Partido Republicano. Incluso llegó a trabajar para algunosos demócratas, hasta que en 2004 llegó a un acuerdo con Rove para que McCain apoyara la reelección de Bush a cambio de reinsertar a su gente en el establishment del partido.
Michael Dennehy será el director político nacional. Esto supone un paso adelante en su carrera. Será su primera campaña nacional. Hasta ahora sólo había operado en New Hampshire. En el año 2000, Dennehy fue el artífice de la sensacional victoria de McCain en las primarias de New Hampshire, donde derrotó al favorito Bush por más de 15 puntos de ventaja. Esta vez operará sorbe los 50 estados.
Rick Davis será el "chairman" de la campaña. Supervisará la recaudación de fondos y el desarrollo del prorgama político. Ya tuvo el mismo papel en 2000. Carla Eudy será la "top fundraiser". Es una mujer de confianza del poderoso ex senador texano Phil Gramm. Texas es el segundo estado del que más dinero sale para campañas electorales.
El fichaje más destacado del equipo de McCain es el de Mark McKinnon, un genio de la publicidad por televisión que trabajó para Bush en 2004. Los servicios de McKinnon han sido muy codiciados por muchos candidatos, pero McCain se ha llevado el gato al agua. Más de la mitad del dinero gastado por Bush-Cheney en publicidad en 2004, fue a parar a la firma Maverick Media, propiedad de McKinnon. Uno de sus anuncios más conocidos fue el llamado "Windsurfing", que ridiculizaba los cambios de postura de John Kerry.
"McKinnon launched his career as a Democratic campaign consultant, then dropped out of politics to work for corporate clients. But the Austin, Texas, image consultant was lured back into politics by his close friend George W. Bush, this time as a Republican strategist", escribía Bill McConnell el 27 de junio de 2005 en Broadcasting & Cable.
Brian Jones, hasta hace poco director de comunicaciones del Comité Nacional Republicano, es ahora el director de comunicaciones de McCain 2008. El hispano Danny Diaz será su número dos. Hasta ahora ha sido jefe de comunicaciones regional en el RNC. Mark Slater será el redactor de discursos del senador. Slater ha sido todos estos años jefe de gabinete de McCain en el Senado.
El encargado de los sondeos de opinión será Bill McIntruff, quien ya ocupó la misma posición en la campaña presidencial de McCain en 2000. Lo acompañará Lance Tarrance, un estratega bien conocido en la vieja escuela de toda la vida en el GOP.
Steve Schmidt será "senior adviser", centrándose sobre todo en el desarrollo del mensaje del candidato. Schmidt es otra de las más notables incorporaciones que ha hecho McCain a su equipo. Protegido de Karl Rove, es uno de los más brillantes y jóvenes consultores políticos del país. Siempre se movió en el círculo cercano a Bush, ejerciendo como portavoz del Vicepresidente Dick Cheney en el primer mandato, y en 2005 participó en el proceso de selección de jueces para el Tribunal Supremo.
El año pasado fue contratado por el Gobernador Arnold Schwarzenegger para manejar su campaña de reelección. Tras este éxito en California, sus servicios fueron pretendidos por diferentes aspirantes presidenciales.
Otro que trabajó para el Gobernador Schwarzenegger en 2006 es Matt David. Él será el encargado de la unidad de respuesta rápida de la campaña presidencial de John McCain. En la campaña de reelección de Schwarzenegger tuvo esa misma función. Fred Davis, supervisor de la publicidad televisiva de Arnold en California, trabajará como consultor creativo para McCain.
Como asesores para asuntos de política doméstica y política inernacional contará con el ex senador Phil Gramm (R - Texas), antiguo presidente del Comité de Finanzas del Senado; y Robert Zoelick, ex Secretario de Estado Adjunto, y antiguo representante comercial de EEUU.
También cuenta ya con importantes asesores en algunos de los primeros estados que albergarán elecciones primarias el año que viene:
- En Iowa: Marlys Popma, conocida activista evangélica y antigua directora ejecutiva del Comité Republicano de Iowa; Bob Haus, que ya trabajó en Iowa para la campaña presidencial de Phil Gramm en 1996 y para Steve Forbes en 2000; Tim Miller, participó en la campaña de Jeff Lamberti para el Congreso.
- En New Hampshire: Peter Spaulding presidirá las operaciones de McCain en este estado; Jill Hazelbaker se encargará de las comunicaciones en New Hampshire, el año pasado fue director de comunicaciones de la campaña senatorial de Tom Kean en New Jersey; Christian Winthrop, que fue portavoz del republicano John Spencer en su campaña senatorial en Nueva York; Steve Duprey, ex presidente del Comité Republicano de New Hampshire, y su mujer Susan Duprey, conocida abogada en el estado; y el ex congresista Chuck Douglas.
- En Carolina del Sur: B.J. Boling, ex director de comunicaciones del Comité Republicano de Carolina del Sur; Doug Smith, Speaker pro Tempore de la Asamblea Estatal;.
- En Michigan: el Fiscal General de Michigan, Mike Cox, será el máximo responsable de la campaña en el estado; Glenn Clark, antiguo director ejecutivo de la Christian Coalition; Dave Dishaw, experto en el reclutamiento de voluntarios.
Otros integrantes de Team McCain son: Sarah Simmons, otra protegida de Karl Rove que trabajó para Schwarzenegger el año pasado; Sig Rogich, consultor asentado en Nevada, con experiencia en el Oeste; Gerald Parsky, íntimo de Bush, considerado el más prominente recaudador de fondos del Partido Republicano en California; Russ Schriefer y Stuart Stevens, miembros del equipo mediático del Presidente Bush; Kathleen Shanahan, que fue jefa de gabinete del ex Gobernador Jeb Bush en Florida; Rob Gray, consultor asentado en Massachusetts; y Spence Whalen, que llevará la campaña por internet.
jueves, 22 de marzo de 2007
The campaign goes on
"The campaign goes on". Cuando todos dábamos por hecho que John Edwards anunciaría la suspensión temporal o definitiva de su campaña, y yo empezaba a escribir un artículo sobre lo que suponía su salida de la carrera, nos ha dejado a todos en cuadro. Ha aparecido el ex senador con traje azul y corbata roja, acompañado de su mujer, para anunciarnos que continuará con la campaña a pesar de que a Elizabeth se le ha reproducido el cáncer que padecía. El tumor es de pequeño tamaño y será tratable, aunque no curable. Aquí está el video de la rueda de prensa (Real Player).
En el blog de Ben Smith, en The Politico, ya anunciaban el abandono de Edwards. Al igual que en el Breaking News de la CNN. Al final todos han tenido que pedir disculpas por la metedura de pata. Aquí en Chapel Hill, las malas lenguas ya habían empezado a decir que este movimiento podría ser debido a que la próxima semana se publicarán las cantidades de dinero que los candidatos han conseguido recaudar hasta el momento en estos 3 primeros meses del año. Las cifras de Edwards estarían por debajo de las expectativas, y eso, unido a que no logra despegar en las encuestas, podría llevarle a tomar la decisión de abandonar para evitar el mal trago de ver que los líderes de opinión no se tomen en serio su candidatura.
Yo no compartía esta opinión, ya que considero que Edwards tiene a su disposición algo fundamental, redes políticas que llevan en funcionamiento más de 2 años en estados como Iowa o New Hampshire. Una maquinaria electoral heredada de su campaña de 2004, que le hace mantener esperanzas de ganar en alguno de esos estados y resituarse en la carrera como la verdadera alternativa a Hillary.
Jontxu el de Lekuberri, otro de los vascos de Chapel Hill que me están acompañando estos dos días aquí, me ha lanzado hace un par de horas -cuando se pensaba que Edwards se retiraría- la gran pregunta que ya se hacían muchos. ¿Qué impacto tendrá la retirada de Edwards en la batalla que se traen esos dos candidatos demócratas? ¿Qué harán los que apoyaban al Senador Edwards? Le he respondido que no hay que fijarse mucho para ver que la lucha entre los demócratas está planteada a tres bandas que en realidad son dos. Dos candidatos que se parecen mucho entre sí -Hillary y Obama-, y un tercero que representa la alternativa ante tanta igualdad -Edwards-.
Hillary y Obama representan cierta imagen de modernidad asociada al vacío de ideología, demócratas pragmáticos y centristas que no pueden evitar resultar algo oportunistas y ambiguos. Una fórmula que se asemeja a la representada por John Kerry hace 3 años. Edwards, por su parte, juega el papel del demócrata tradicional, representante de la clase trabajadora, vinculado al poder de los sindicatos, al desarrollo de grandes programas federales, a la vieja filosofía liberal. Hillary es el establishment; Obama es el "good feeling"; Edwards es el populismo progresista, el "labor democrat".
Es complicado que, en caso de tener que apoyar a otro candidato, quienes apoyan a Edwards se sientan fácilmente atraídos por Hillary u Obama. Es difícil saber a quién pueden aborrecer más, a la élite o al impostor. Ven en Hillary a la candidata inevitable y en Obama al candidato que, sin apenas mensaje, arrebató la posición de "under dog" a Edwards. Obama se ha convertido en alternativa a Hillary aportando novedad sólo en los códigos estéticos.
Esto hace posible que un supporter de Obama pueda pasarse sin mucho esfuerzo a apoyar a Hillary en cuanto su candidato flojee un poco. Y viceversa. Alguien que apoya a Edwards en cambio, sería más resistente al transfuguismo ante condiciones adversas para su candidato. Es algo que me han repetido muchos partidarios de Edwards estos días. Entre ellos Ted Oleagagogeaskoa, un trabajador de la industria textil, asiduo de la Euskal Etxea de Chapel Hill.
John Edwards ostenta el título de "darling" de los sindicatos. Uno de mis empeños estos días ha sido cuestionar a gente como Ted Oleagagogeaskoa si estarían dispuestos a apoyar a otro candidato si ven que Edwards no termina de despegar. Todos ellos demuestran fidelidad por Edwards y coinciden en que ninguno de los otros precandidatos menores que ya está dentro, parecen cumplir las condiciones para asumir el rol de Edwards en el futuro. Algo en lo que yo coincido con ellos. Pero tal vez haya que mirar hacia dos hombres que de momento no han entrado en la carrera: Wesley Clark y Al Gore.
Hablé de Clark hace unos pocos días. Políticamente podría cubrir bien el espacio del populismo progresista que en el que se mueve John Edwards. Con el añadido de su experiencia militar e inagotable credibilidad en el debate sobre cuestiones de seguridad nacional, punto débil de los otros aspirantes demócratas. Pero no es un político profesional. Para él, el escenario ideal sería ser nominado sin tener que hacer campaña. Esa no es la predisposición que se espera de un candidato competitivo.
La opción Gore se apoya en la experiencia histórica. En una especie de re-edición de la conocida "estrategia Nixon". Pero en este caso en el lado demócrata. Richard Nixon pierde las elecciones en el 60, cuando es el vicepresidente en ejercicio y es visto como un moderado. En el 64 no se presenta y, para sorpresa de muchos, apoya al radical Goldwater en las primarias y eso hace que en el 68 tenga el favor de la extrema derecha, que, unido a su imagen de moderado pragmático, le hace ganar la nominación en una sorpresiva resurrección política...
La jugada de Gore habría empezado en 2004 apoyando a Howard Dean, ganándose así el favor y la simpatía de los grupos de intereses de izquierdas que controlan gran parte del proceso de primarias. Eso unido a su imagen de candidato serio con experiencia en la administración y el Congreso, lo situaría en una posición de salida inmejorable para las internas demócratas de 2008.
Por el momento sigue John Edwards. Pero si en el futuro ve incompatible el desarrollo de la campaña con la enfermedad de su mujer, y se ve obligado a abandonar la carrera, incluso por falta de fondos, se abriría una autopista única para Al Gore. Una autopista que hace unas horas parecía abierta. Tal vez ese sea el estímulo que necesita el ex vicepresidente para lanzarse a la carrera. Hasta ahora no ve lugar.
Será mejor que ya me vuelva para Nashville. Estoy agotado. Me quedaré un rato a charlar con la gente que anda por aquí diciendo que Edwards siempre fue muy dado a este tipo de golpes de efecto para volver a situar su nombre en primera página y abriendo los informativos. Veremos si existe o no un "efecto Elizabeth Edwards" en las encuestas que salgan próximamente. De momento lo que sí ha conseguido es que yo le haya dedicado más tiempo del que tenía pensado dedicarle estos dos días. Puede que eso refleje a pequeña escala lo que se buscaba.
En el blog de Ben Smith, en The Politico, ya anunciaban el abandono de Edwards. Al igual que en el Breaking News de la CNN. Al final todos han tenido que pedir disculpas por la metedura de pata. Aquí en Chapel Hill, las malas lenguas ya habían empezado a decir que este movimiento podría ser debido a que la próxima semana se publicarán las cantidades de dinero que los candidatos han conseguido recaudar hasta el momento en estos 3 primeros meses del año. Las cifras de Edwards estarían por debajo de las expectativas, y eso, unido a que no logra despegar en las encuestas, podría llevarle a tomar la decisión de abandonar para evitar el mal trago de ver que los líderes de opinión no se tomen en serio su candidatura.
Yo no compartía esta opinión, ya que considero que Edwards tiene a su disposición algo fundamental, redes políticas que llevan en funcionamiento más de 2 años en estados como Iowa o New Hampshire. Una maquinaria electoral heredada de su campaña de 2004, que le hace mantener esperanzas de ganar en alguno de esos estados y resituarse en la carrera como la verdadera alternativa a Hillary.
Jontxu el de Lekuberri, otro de los vascos de Chapel Hill que me están acompañando estos dos días aquí, me ha lanzado hace un par de horas -cuando se pensaba que Edwards se retiraría- la gran pregunta que ya se hacían muchos. ¿Qué impacto tendrá la retirada de Edwards en la batalla que se traen esos dos candidatos demócratas? ¿Qué harán los que apoyaban al Senador Edwards? Le he respondido que no hay que fijarse mucho para ver que la lucha entre los demócratas está planteada a tres bandas que en realidad son dos. Dos candidatos que se parecen mucho entre sí -Hillary y Obama-, y un tercero que representa la alternativa ante tanta igualdad -Edwards-.
Hillary y Obama representan cierta imagen de modernidad asociada al vacío de ideología, demócratas pragmáticos y centristas que no pueden evitar resultar algo oportunistas y ambiguos. Una fórmula que se asemeja a la representada por John Kerry hace 3 años. Edwards, por su parte, juega el papel del demócrata tradicional, representante de la clase trabajadora, vinculado al poder de los sindicatos, al desarrollo de grandes programas federales, a la vieja filosofía liberal. Hillary es el establishment; Obama es el "good feeling"; Edwards es el populismo progresista, el "labor democrat".
Es complicado que, en caso de tener que apoyar a otro candidato, quienes apoyan a Edwards se sientan fácilmente atraídos por Hillary u Obama. Es difícil saber a quién pueden aborrecer más, a la élite o al impostor. Ven en Hillary a la candidata inevitable y en Obama al candidato que, sin apenas mensaje, arrebató la posición de "under dog" a Edwards. Obama se ha convertido en alternativa a Hillary aportando novedad sólo en los códigos estéticos.
Esto hace posible que un supporter de Obama pueda pasarse sin mucho esfuerzo a apoyar a Hillary en cuanto su candidato flojee un poco. Y viceversa. Alguien que apoya a Edwards en cambio, sería más resistente al transfuguismo ante condiciones adversas para su candidato. Es algo que me han repetido muchos partidarios de Edwards estos días. Entre ellos Ted Oleagagogeaskoa, un trabajador de la industria textil, asiduo de la Euskal Etxea de Chapel Hill.
John Edwards ostenta el título de "darling" de los sindicatos. Uno de mis empeños estos días ha sido cuestionar a gente como Ted Oleagagogeaskoa si estarían dispuestos a apoyar a otro candidato si ven que Edwards no termina de despegar. Todos ellos demuestran fidelidad por Edwards y coinciden en que ninguno de los otros precandidatos menores que ya está dentro, parecen cumplir las condiciones para asumir el rol de Edwards en el futuro. Algo en lo que yo coincido con ellos. Pero tal vez haya que mirar hacia dos hombres que de momento no han entrado en la carrera: Wesley Clark y Al Gore.
Hablé de Clark hace unos pocos días. Políticamente podría cubrir bien el espacio del populismo progresista que en el que se mueve John Edwards. Con el añadido de su experiencia militar e inagotable credibilidad en el debate sobre cuestiones de seguridad nacional, punto débil de los otros aspirantes demócratas. Pero no es un político profesional. Para él, el escenario ideal sería ser nominado sin tener que hacer campaña. Esa no es la predisposición que se espera de un candidato competitivo.
La opción Gore se apoya en la experiencia histórica. En una especie de re-edición de la conocida "estrategia Nixon". Pero en este caso en el lado demócrata. Richard Nixon pierde las elecciones en el 60, cuando es el vicepresidente en ejercicio y es visto como un moderado. En el 64 no se presenta y, para sorpresa de muchos, apoya al radical Goldwater en las primarias y eso hace que en el 68 tenga el favor de la extrema derecha, que, unido a su imagen de moderado pragmático, le hace ganar la nominación en una sorpresiva resurrección política...
La jugada de Gore habría empezado en 2004 apoyando a Howard Dean, ganándose así el favor y la simpatía de los grupos de intereses de izquierdas que controlan gran parte del proceso de primarias. Eso unido a su imagen de candidato serio con experiencia en la administración y el Congreso, lo situaría en una posición de salida inmejorable para las internas demócratas de 2008.
Por el momento sigue John Edwards. Pero si en el futuro ve incompatible el desarrollo de la campaña con la enfermedad de su mujer, y se ve obligado a abandonar la carrera, incluso por falta de fondos, se abriría una autopista única para Al Gore. Una autopista que hace unas horas parecía abierta. Tal vez ese sea el estímulo que necesita el ex vicepresidente para lanzarse a la carrera. Hasta ahora no ve lugar.
Será mejor que ya me vuelva para Nashville. Estoy agotado. Me quedaré un rato a charlar con la gente que anda por aquí diciendo que Edwards siempre fue muy dado a este tipo de golpes de efecto para volver a situar su nombre en primera página y abriendo los informativos. Veremos si existe o no un "efecto Elizabeth Edwards" en las encuestas que salgan próximamente. De momento lo que sí ha conseguido es que yo le haya dedicado más tiempo del que tenía pensado dedicarle estos dos días. Puede que eso refleje a pequeña escala lo que se buscaba.
Team Edwards a la espera
Estoy en Chapel Hill. Tenía previsto regresar a Nashville hace unas pocas horas. Pero sorpresivamente saltó un rumor que me ha hecho decidir quedarme aquí hasta esta noche. Anoche comenzaron a correr especulaciones de que el ex senador John Edwards haría hoy un anuncio importante. Estas especulaciones venían precedidas por las informaciones acerca de que el candidato había tenido que suspender un acto de campaña en Iowa por algún problema relacionado con la salud de su mujer, enferma de cáncer desde hace dos años.
Por aquí se escucha de todo. Hay quien dice que Edwards va a anunciar que se sale de la carrera para concentrarse en estar con su mujer, cuya salud habría empeorado. Otros dicen todo lo contrario, que anunciarán que ella se ha curado definitivamente. Los demás piensan que la conferencia de prensa será para informar del empeoramiento de la salud de Elizabeth Edwards, pero sin dejar de seguir en campaña. "All our love to Elizabeth, John and family as we await tomorrow's announcement. No matter what we learn tomorrow, we're with you and love you" pone en el blog de su página web. Parece un mal asunto.
Apenas sin darnos cuenta, la expectación se ha disparado en esta ciudad de 52,000 habitantes (millón y meido en el área metropolitina). Ayer todo parecía tranquilo en el 410 de Market Street, donde están situados los headquarters del candidato presidencial. Allí pude hablar con Michelle, una encantadora mujer, abogada de la firma Deboviose & Plimpton, que colabora en la campaña. Ella me informó de todos los detalles de Team Edwards.
El ex congresista David Bonior (D - Michigan), el que fuera en su día Minority Whip en la Cámara de Representantes de EEUU, está ejerciendo como campaign manager. Es también su enlace negociador con los sindicatos. Es decir, para conseguir el apoyo público de los sindicatos a su candidatura. Un apoyo que suele ser decisivo en las primarias demócratas. Aquí podéis leer una amplia entrevista a Bonior, publicada en el Newsweek.
Julius Chambers, antiguo rector de la North Carolina Central University, será el tesorero de la campaña. Ya ejerció de jefe de finanzas de Edwards en su campaña de 2004. Jennifer Swanson será la responsable de la recaudación de fondos, papel que ya tenía en el comité de acción política del senador.
Harrison Hickman será el encargado de los sondeos de opinión y análisis del electorado. Ha tenido esta misma responsabilidad en todas las campañas electorales en las que ha participado John Edwards. Desde su primera campaña al Senado en 1998, cuando nadie apostaba por él y salió vencedor. Me han hablado mucho estos días de esa primera elección de Edwards. Espero en el futuro poder escribir sobre ello. Hickman también trabajó el pasado año como pollster para la campaña del demócrata Ben Cardin al Senado por Maryland.
Jonathon Prince es el director de comunicaciones. Es un hombre del círculo cercano a Edwards, que colaboró en la creación del Citizens for a Strong Senate. David Ginsberg, que trabaja para la firma de sondeos Penn Schoen & Berland Associates, será el portavoz del candidato.
Jennifer Palmieri será la media adviser. Anteriormente trabajó como secretaria de prensa para el Comité Nacional Demócrata y el Center for American Progress. El encargado de la campaña por internet es Matthew Gross, fichado el año pasado y que en 2004 tuvo ese mismo papel en la campaña presidencial de Howard Dean.
Otros nombres destacados en el equipo de Edwards son: Miles Lackey, el que fuera su jefe de gabinete en el Senado; Nick Baldick, un reputado estratega que fue campaign manager de su campaña en 2004, y que este año se centrará exclusivamente en la estrategia para las primarias de Iowa, Nevada, New Hampshire y Carolina del Sur; Christina Reynolds tendrá responsabilidades sobre el desarrollo del programa político del candidato; al igual que David Madina, quien ha sido director político del comité de acción política de Edwards; John Moylan, asesor, dirigió el comité South Carolina for Edwards en 2004, que le llevó a ganar la primaria demócrata en ese estado.
A nivel estatal, Jennifer O'Malley, Jackie Lee y Pat Maloney llevarán la campaña en Iowa, dodne ya trabajaron en 2004 para Edwards. En Nevada, el jefe de campaña será Bill Hyers, que en 2006 dirigió la exitosa campaña de la demócrata Kristen Gillibrand al Congreso. En Nevada también contará con Roberto Rodríguez, el que fuera director del California Voter Registration Project en 2004. Beth Leonard, jefa de campaña de John Kerry para Ohio en 2004, será la jefa de campaña de Edwards en New Hampshire este año.
Es un equipo en el que no están las grandes figuras que hay alrededor de Hillary Clinton. Pero es significativa la presencia de un peso pesado como David Bonior, un político profesional al que le gusta estar delante de las cámaras, como director de campaña. Esto contrasta con el perfil de la mayoría de campaign managers.
Me quedo a la espera. A ver en qué resulta la conferencia de prensa de John Edwards anunciada para este mediodía, hora de Carolina del Norte. Ahora me comeré una tortilla de patatas como hamaiketako en la Euskal Etxea, y después me dirigiré al lugar donde está prevista la rueda de prensa. A ver qué se cuenta.
Por aquí se escucha de todo. Hay quien dice que Edwards va a anunciar que se sale de la carrera para concentrarse en estar con su mujer, cuya salud habría empeorado. Otros dicen todo lo contrario, que anunciarán que ella se ha curado definitivamente. Los demás piensan que la conferencia de prensa será para informar del empeoramiento de la salud de Elizabeth Edwards, pero sin dejar de seguir en campaña. "All our love to Elizabeth, John and family as we await tomorrow's announcement. No matter what we learn tomorrow, we're with you and love you" pone en el blog de su página web. Parece un mal asunto.
Apenas sin darnos cuenta, la expectación se ha disparado en esta ciudad de 52,000 habitantes (millón y meido en el área metropolitina). Ayer todo parecía tranquilo en el 410 de Market Street, donde están situados los headquarters del candidato presidencial. Allí pude hablar con Michelle, una encantadora mujer, abogada de la firma Deboviose & Plimpton, que colabora en la campaña. Ella me informó de todos los detalles de Team Edwards.
El ex congresista David Bonior (D - Michigan), el que fuera en su día Minority Whip en la Cámara de Representantes de EEUU, está ejerciendo como campaign manager. Es también su enlace negociador con los sindicatos. Es decir, para conseguir el apoyo público de los sindicatos a su candidatura. Un apoyo que suele ser decisivo en las primarias demócratas. Aquí podéis leer una amplia entrevista a Bonior, publicada en el Newsweek.
Julius Chambers, antiguo rector de la North Carolina Central University, será el tesorero de la campaña. Ya ejerció de jefe de finanzas de Edwards en su campaña de 2004. Jennifer Swanson será la responsable de la recaudación de fondos, papel que ya tenía en el comité de acción política del senador.
Harrison Hickman será el encargado de los sondeos de opinión y análisis del electorado. Ha tenido esta misma responsabilidad en todas las campañas electorales en las que ha participado John Edwards. Desde su primera campaña al Senado en 1998, cuando nadie apostaba por él y salió vencedor. Me han hablado mucho estos días de esa primera elección de Edwards. Espero en el futuro poder escribir sobre ello. Hickman también trabajó el pasado año como pollster para la campaña del demócrata Ben Cardin al Senado por Maryland.
Jonathon Prince es el director de comunicaciones. Es un hombre del círculo cercano a Edwards, que colaboró en la creación del Citizens for a Strong Senate. David Ginsberg, que trabaja para la firma de sondeos Penn Schoen & Berland Associates, será el portavoz del candidato.
Jennifer Palmieri será la media adviser. Anteriormente trabajó como secretaria de prensa para el Comité Nacional Demócrata y el Center for American Progress. El encargado de la campaña por internet es Matthew Gross, fichado el año pasado y que en 2004 tuvo ese mismo papel en la campaña presidencial de Howard Dean.
Otros nombres destacados en el equipo de Edwards son: Miles Lackey, el que fuera su jefe de gabinete en el Senado; Nick Baldick, un reputado estratega que fue campaign manager de su campaña en 2004, y que este año se centrará exclusivamente en la estrategia para las primarias de Iowa, Nevada, New Hampshire y Carolina del Sur; Christina Reynolds tendrá responsabilidades sobre el desarrollo del programa político del candidato; al igual que David Madina, quien ha sido director político del comité de acción política de Edwards; John Moylan, asesor, dirigió el comité South Carolina for Edwards en 2004, que le llevó a ganar la primaria demócrata en ese estado.
A nivel estatal, Jennifer O'Malley, Jackie Lee y Pat Maloney llevarán la campaña en Iowa, dodne ya trabajaron en 2004 para Edwards. En Nevada, el jefe de campaña será Bill Hyers, que en 2006 dirigió la exitosa campaña de la demócrata Kristen Gillibrand al Congreso. En Nevada también contará con Roberto Rodríguez, el que fuera director del California Voter Registration Project en 2004. Beth Leonard, jefa de campaña de John Kerry para Ohio en 2004, será la jefa de campaña de Edwards en New Hampshire este año.
Es un equipo en el que no están las grandes figuras que hay alrededor de Hillary Clinton. Pero es significativa la presencia de un peso pesado como David Bonior, un político profesional al que le gusta estar delante de las cámaras, como director de campaña. Esto contrasta con el perfil de la mayoría de campaign managers.
Me quedo a la espera. A ver en qué resulta la conferencia de prensa de John Edwards anunciada para este mediodía, hora de Carolina del Norte. Ahora me comeré una tortilla de patatas como hamaiketako en la Euskal Etxea, y después me dirigiré al lugar donde está prevista la rueda de prensa. A ver qué se cuenta.
martes, 20 de marzo de 2007
Me espera Chapel Hill
Me llegó una inesperada invitación de la Euskal Etxea de Chapel Hill, Carolina del Norte, para ir allí a pasar un par de días, y eso es lo que voy a hacer. No es que haya mucho vasco por aquella zona. El verdadero motivo que me hace acudir a la cita es el poder visitar las oficinas centrales de la campaña del ex senador John Edwards.
Mi próximo post estará dedicado a su equipo de campaña, y será mejor si lo puedo escribir después de haber visto con mis propios ojos cómo trabaja su gente. Así que después de comer cordero en la Euskal Etxea y discutir de la mala situación deportiva del Athletic de Bilbao, único tema de conversación últimamente en las casas vascas de todo el mundo, me daré una vuelta por los headquarters de Edwards.
Me desplazaré en autobus. Me encanta. Dentro de apenas una hora sale en la octava avenida de Nashville. Ando un poco justo de tiempo. Escribiré en cuanto llegue a Chapel Hill, me acomode, y tenga oportunidad de ver todo aquello.
Mi próximo post estará dedicado a su equipo de campaña, y será mejor si lo puedo escribir después de haber visto con mis propios ojos cómo trabaja su gente. Así que después de comer cordero en la Euskal Etxea y discutir de la mala situación deportiva del Athletic de Bilbao, único tema de conversación últimamente en las casas vascas de todo el mundo, me daré una vuelta por los headquarters de Edwards.
Me desplazaré en autobus. Me encanta. Dentro de apenas una hora sale en la octava avenida de Nashville. Ando un poco justo de tiempo. Escribiré en cuanto llegue a Chapel Hill, me acomode, y tenga oportunidad de ver todo aquello.
lunes, 19 de marzo de 2007
Team Mitt
Acabo de hablar con Jimmy Zubizarreta. Jimmy es un viejo amigo que conocí en mis tiempos en el Oeste. Es hijo de unos panaderos navarros de Elizondo que emigraron a América y se asentaron en Salt Lake City, Utah. Allí Jimmy ha conseguido hacerse un hombre respetado en la comunidad, gracias a su éxito como hombre de negocios. Es actualmente el joven propietario de una importante cadena de tintorerías de la ciudad. Ha hecho sus pinitos en la política local y es un fuerte partidario de la campaña presidencial de Mitt Romney. Le siento muy optimista.
Romney ha sido gobernador de Massachusetts, un estado desconectado de las esencias de un lugar como Utah, pero anteriormente fue jefe del comité organizador de los Juegos Olímpicos de Salt Lake City 2002. Eso, unido a su herencia mormona, hace que en esa ciudad se encuentren muchos de sus más vibrantes seguidores, así como su mayor fuente de financiación. El multimillonario Jon Huntsman, un de los hombres más ricos de América y fundamental apoyo económico en toda la carrera política de Mitt.
Jimmy Zubizarreta será pues, mi gran aliado en los próximos dos años a la hora de analizar la campaña del Gobernador Romney. Pero no el único porque aquí, en Tennessee, tenemos a dos figuras que están jugando un papel fundamental en el equipo de Romney. Hablo de nuestros congresistas John Duncan y Marsha Blackburn.
Dos de los primeros miembros del Congreso en dar su apoyo a Romney. Mi ayudante Peru Hornblower pudo charlar brevemente con ellos cuando Romney visitó Nashville el pasado 6 de marzo como parte de su itinerario de campaña. Creo que nos servirá de mucha ayuda tener en el estado a dos personajes tan cercanos al candidato.
Gracias a las informaciones que me ha facilitado Jimmy Zubizarreta desde Salt Lake City, y a las investigacioens de Peru entre los "Romney supporters" de Tennessee, he podido hacer esta lista de nombres que tendrán un rol protagonista en su campaña. Decir antes de nada que me parece la campaña mejor organizada entre los republicanos. Al menos por lo visto hasta ahora.
Beth Myers será seguramente la campaign manager. Myers ha sido jefa de gabinete de Romney cuando este era gobernador y ha dirigido su comité de acción política. Anteriormente fue jefa de gabinete del Tesorero del Estado de Massachusetts, Joe Maloney, y en los años 80 trabajó con Karl Rove en varias campañas estatales. Tiene poca experiencia a nivel nacional pero parece contar con la total confianza del candidato.
La directora política de la campaña será Julie Teer. Teer fue secretaria de Prensa del gobernador Romney entre 2005 y 2007. En 2004 fue jefa de campaña de Bush-Cheney en New Hampshire. Anteriormente fue directora de comunicaciones del Comité Republicano de New Hampshire y jefa de prensa de la campaña al Senado de John Sununu (R - New Hampshire) en 2002. En los años 90 trabajó en Washington como secretaria de prensa del senador y más tarde secretario de Energía, Spencer Abraham (R - Michigan).
El secretario de prensa de la campaña a nivel nacional será Jared Young. Young es un antiguo experto en medios de comunicación que ha trabajado durante años en la Heritage Foundation. Entre 2003 y 2004 trabajó en Iraq como asesor mediático del enviado de EEUU, Paul Bremer, y como director del Centro de Prensa Internacional de Bagdad. Natural de Oklahoma, ha trabajado como jefe de prensa en las campañas electorales del senador Jim Inhofe (R - Oklahoma).
El portavoz de la campaña, el secretario de prensa "viajero" que acompaña al candidato en sus viajes, es Kevin Madden. Madden ha sido hasta ahora secretario de prensa del congresista John Boehner (R - Ohio), líder de la minoría republicana en la Cámara de Representantes, y anteriormente fue secretario de prensa del congresista Tom DeLay (R - Texas) cuando este era líder de la mayoría.
El director de finanzas está previsto que sea Spencer Zwick. Fue subjefe de gabinete de Romney cuando este era gobernador, y trabajó en su campaña de 2002. Anteriormente fue el encargado de marketing en la organización de los Juegos Olímpicos de Salt Lake City. Zwick es mormón y está muy vinculado al multimillonario del Oeste Jon Huntsman, del que he hablado más arriba.
El jefe de propaganda y publicidad será Alex Castellanos. Uno de los mejores. Ya tuvo esa misma responsabilidad en la campaña presidencial de George W. Bush en 2000. Experto en propaganda negativa. Fue célebre, por ejemplo, aquel anuncio en el que se criticaba el plan de Al Gore para la sanidad, en la que se incluía de forma casi subliminal la palabra "RATS" (ratas) asociada a los demócratas. Ha trabajado sobre todo para diferentes políticos del Estado de la Florida, aunque en el último año trabajó en California para la victoriosa campaña del gobernador Schwarzenegger.
Jan van Lohuizen será el encargado de los sondeos de opinión y análisis del electorado. Un veterano de la política electoral, muy vinculado a Bush. Trabajó para Bush desde su primera campaña para gobernador de Texas en 1994, y en su primer mandato como presidente, van Lohuizen tuvo la función de guiar la retórica del presidente en función de los sondeos de opinión. Algo en lo que indudablemente tuvo éxito entre 2001 y 2005.
Otro hombre vinculado a Bush, Alex Gage, dueño de la consultora TargetPoint, será el encargado de la movilización de los votantes en los estados cruciales de las primarias. Gage ya tuvo esa función en las campañas de Bush con el exitoso modelo "get-out-the-vote", después copiado por todos.
En lo que se refiere a expertos para desarrollar el programa político, se sabe que cuenta con dos prestigiosos asesores económicos como Glenn Hubbard y Greg Mankiw. Ambos han sido en el pasado presidentes del Consejo Económico de la Casa Blanca.
También, a diferencia de muchos candidatos, ha preparado ya una basta organización en los 5 primeros estados que albergarán primarias:
Romney ha sido gobernador de Massachusetts, un estado desconectado de las esencias de un lugar como Utah, pero anteriormente fue jefe del comité organizador de los Juegos Olímpicos de Salt Lake City 2002. Eso, unido a su herencia mormona, hace que en esa ciudad se encuentren muchos de sus más vibrantes seguidores, así como su mayor fuente de financiación. El multimillonario Jon Huntsman, un de los hombres más ricos de América y fundamental apoyo económico en toda la carrera política de Mitt.
Jimmy Zubizarreta será pues, mi gran aliado en los próximos dos años a la hora de analizar la campaña del Gobernador Romney. Pero no el único porque aquí, en Tennessee, tenemos a dos figuras que están jugando un papel fundamental en el equipo de Romney. Hablo de nuestros congresistas John Duncan y Marsha Blackburn.
Dos de los primeros miembros del Congreso en dar su apoyo a Romney. Mi ayudante Peru Hornblower pudo charlar brevemente con ellos cuando Romney visitó Nashville el pasado 6 de marzo como parte de su itinerario de campaña. Creo que nos servirá de mucha ayuda tener en el estado a dos personajes tan cercanos al candidato.
Gracias a las informaciones que me ha facilitado Jimmy Zubizarreta desde Salt Lake City, y a las investigacioens de Peru entre los "Romney supporters" de Tennessee, he podido hacer esta lista de nombres que tendrán un rol protagonista en su campaña. Decir antes de nada que me parece la campaña mejor organizada entre los republicanos. Al menos por lo visto hasta ahora.
Beth Myers será seguramente la campaign manager. Myers ha sido jefa de gabinete de Romney cuando este era gobernador y ha dirigido su comité de acción política. Anteriormente fue jefa de gabinete del Tesorero del Estado de Massachusetts, Joe Maloney, y en los años 80 trabajó con Karl Rove en varias campañas estatales. Tiene poca experiencia a nivel nacional pero parece contar con la total confianza del candidato.
La directora política de la campaña será Julie Teer. Teer fue secretaria de Prensa del gobernador Romney entre 2005 y 2007. En 2004 fue jefa de campaña de Bush-Cheney en New Hampshire. Anteriormente fue directora de comunicaciones del Comité Republicano de New Hampshire y jefa de prensa de la campaña al Senado de John Sununu (R - New Hampshire) en 2002. En los años 90 trabajó en Washington como secretaria de prensa del senador y más tarde secretario de Energía, Spencer Abraham (R - Michigan).
El secretario de prensa de la campaña a nivel nacional será Jared Young. Young es un antiguo experto en medios de comunicación que ha trabajado durante años en la Heritage Foundation. Entre 2003 y 2004 trabajó en Iraq como asesor mediático del enviado de EEUU, Paul Bremer, y como director del Centro de Prensa Internacional de Bagdad. Natural de Oklahoma, ha trabajado como jefe de prensa en las campañas electorales del senador Jim Inhofe (R - Oklahoma).
El portavoz de la campaña, el secretario de prensa "viajero" que acompaña al candidato en sus viajes, es Kevin Madden. Madden ha sido hasta ahora secretario de prensa del congresista John Boehner (R - Ohio), líder de la minoría republicana en la Cámara de Representantes, y anteriormente fue secretario de prensa del congresista Tom DeLay (R - Texas) cuando este era líder de la mayoría.
El director de finanzas está previsto que sea Spencer Zwick. Fue subjefe de gabinete de Romney cuando este era gobernador, y trabajó en su campaña de 2002. Anteriormente fue el encargado de marketing en la organización de los Juegos Olímpicos de Salt Lake City. Zwick es mormón y está muy vinculado al multimillonario del Oeste Jon Huntsman, del que he hablado más arriba.
El jefe de propaganda y publicidad será Alex Castellanos. Uno de los mejores. Ya tuvo esa misma responsabilidad en la campaña presidencial de George W. Bush en 2000. Experto en propaganda negativa. Fue célebre, por ejemplo, aquel anuncio en el que se criticaba el plan de Al Gore para la sanidad, en la que se incluía de forma casi subliminal la palabra "RATS" (ratas) asociada a los demócratas. Ha trabajado sobre todo para diferentes políticos del Estado de la Florida, aunque en el último año trabajó en California para la victoriosa campaña del gobernador Schwarzenegger.
Jan van Lohuizen será el encargado de los sondeos de opinión y análisis del electorado. Un veterano de la política electoral, muy vinculado a Bush. Trabajó para Bush desde su primera campaña para gobernador de Texas en 1994, y en su primer mandato como presidente, van Lohuizen tuvo la función de guiar la retórica del presidente en función de los sondeos de opinión. Algo en lo que indudablemente tuvo éxito entre 2001 y 2005.
Otro hombre vinculado a Bush, Alex Gage, dueño de la consultora TargetPoint, será el encargado de la movilización de los votantes en los estados cruciales de las primarias. Gage ya tuvo esa función en las campañas de Bush con el exitoso modelo "get-out-the-vote", después copiado por todos.
En lo que se refiere a expertos para desarrollar el programa político, se sabe que cuenta con dos prestigiosos asesores económicos como Glenn Hubbard y Greg Mankiw. Ambos han sido en el pasado presidentes del Consejo Económico de la Casa Blanca.
También, a diferencia de muchos candidatos, ha preparado ya una basta organización en los 5 primeros estados que albergarán primarias:
- En Iowa: el jefe de su campaña será el abogado Doug Gross, antiguo jefe de gabinete del gobernador Terry Branstad. El jefe de finanzas en Iowa será David Kochel, antiguo director ejecutivo del Comité Republicano de Iowa y actualmente dueño de la consultora JDK Marketing & Public Affairs. Contará además con pesos pesados como el presidente de la Asamblea Estatal de Iowa, Christopher Rants.
- En New Hampshire: el presidente de la campaña en este estado será Tom Rath, antiguo Fiscal General de New Hampshire, y jefe de las campañas electorales de los senadores republicanos Warren Rudman y Judd Gregg. Fue asesor de campaña para las primarias de New Hampshire de Howard Baker (1980), Bob Dole (1988), Lamar Alexander (1996) y George W. Bush (2000). Rich Killion, vicepresidente de Elevare Communications, llevará las relaciones con los medios en el estado de granito. También estará Bruce Keough, número dos de la campaña de Bush en New Hampshire en 2004.
- En Carolina del Sur: los dos hombres fuertes de su campaña en Carolina del Sur serán Nic Breeding, que dirigió la exitosa campaña al Senado de Lindsey Graham en 2002, y George Ramsey, director político de la también ganadora campaña de Jim DeMint al Senado en 2004.
- En Florida tres nombres fundamentales: Sally Bradshaw, antigua jefa de gabinete del gobernador Jeb Bush, dirigió también las dos campañas a gobernador de Jeb; Ann Herberger, jefa de finanzas de las campañas del gobernador Jeb Bush; y Mandy Fletcher, hasta ahora director ejecutivo del comité de acción política de Jeb Bush, 'Foundation for Florida’s Future'.
- En Michigan: integrarán el equipo de Romney en Michigan, Katie Packer, ex asesora del senador Spencer Abraham; John Rakolta, dueño de una de las más importantes constructoras de Detroit, será el jefe de finanzas; David Fisher, hombre vinculado a la industria del automóvil; Craig DeRoche, un apoyo político vital ya que es el actual presidente de la Asamblea Estatal de Michigan.
¿Podrá un mormón convertirse en Presidente de los Estados Unidos? Esa es una cuestión que ya trataré en el futuro.
Team Barack
Al venir esta mañana temprano hacia aquí, me he encontrado una vez más con el viejo Cornelius pescando en el río Cumberland. Es un afroamericano septuagenario muy orgulloso, al que le chifla pasarse las mañanas pescando aunque es alérgico al pescado y regala todo lo que pesca. De un tiempo a esta parte, sólo hay un tema de conversación cada vez que me lo encuentro: Barack Obama.
Las primeras palabras que me dijo Cornelius sobre el senador de Illinois: "Ese hombre no es negro, yo no puedo sentir por él, el amor a un Hermano". Quedé sorprendido. Yo esperaba muestras de ilusión por parte de la comunidad negra de Nashville. Pero nada más lejos de la realidad. Después comprendí que negro significa en la realidad política y social de esta comunidad, alguien que desciende de los esclavos africanos. No es el caso de Obama.
He podido observar que esta opinión de Cornelius es la postura generalizada también entre los afroamericanos más notorios de la vida cultural del país. Mientras los analistas blancos ven en Obama un símbolo de unión en un país heterogeneo, hace poco leí en la revista Salon a la autora negra Debra Dickerson mantener la misma postura de desconfianza que veo en Cornelius cada mañana. "Black" no se refiere al color de piel sino más bien a unos orígenes, una filosofía, una herencia cultural.
Coincide esto con la encuesta que presentó el Washington Post al poco tiempo de que el Senador Obama anunciase su candidatura. El 60 % de los afroamericanos apoyaban a su rival blanca, Hillary Clinton. Obama conseguía solamente el 20 % de apoyo entre el electorado negro. La campaña es larga y Obama tiene menos reconocimiento de nombre que Clinton. Aún debe tratar de convencer a aquellos que son como él, pero que desconfían de él. Objetivo que no le será fácil.
Para tal empeño contará con un equipo de campaña que aún se encuentra en construcción. No es un equipo de perfil afroamericano, lo cual puede indicar que el verdadero objetivo de Obama es atraer el voto moderado y algo apolítico, así como el dinero de las grandes corporaciones que jamás financiarían a un candidato negro que no fuera capaz de traspasar las barreras raciales y culturales.
Aunque el equipo aún está abierto a cambios, dos de sus hombres de confianza manejarán la campaña. El director será David Plouffe. El mismo que dirigió su campaña para el Senado en 2004. Plouffe tiene sobrada experiencia en campañas electorales. En el año 2000 fue director ejecutivo del Democratic Congressional Campaign Committee para las elecciones al Congreso de ese año.
Anteriormente, fue subjefe de gabinete del congresista Dick Gephardt (D - Missouri) cuando este era Líder de la Minoría en la Cámara de Representantes; dirigió en 1996 la exitosa campaña de Bob Torricelli (D - New Jersey) al Senado; dirigió en 1994 la campaña del demócrata Charles Oberly al Senado por Delaware, esta no tan exitosa debido a que aquel año fue muy malo para los demócratas; dirigió en 1992 la campaña de reelección del congresista John Oliver (D - Massachusetts); y ese mismo año trabajó en la campaña presidencial del senador Tom Harkin (D - Iowa).
David Axelrod, de Chicago, otro hombre de total confianza de Obama, será el encargado de la propaganda, la publicidad televisiva y las relaciones con los medios de comunicación. Axelrod fue columnista del periódico conservador Chicago Tribune, hasta que decidió ser consultor político y fundó la consultoría Axelrod and Associates, ahora llamada AKP Message and Media. Axelrod trabajó para la campaña presidencial de John Edwards en 2004.
También estarán en el equipo de Obama algunos que pertenecieron en su día al staff del senador Tom Dashle (D - Dakota del Sur) cuando este era Líder de los demócratas en el Senado. Es el caso de Juliana Smoot, quien será jefa de finanzas de la campaña de Obama, y Dan Pfeiffer, que será el portavoz del candidato en sus desplazamientos por el país. El portavoz viajero que llaman allí.
El secretario de Prensa de la campaña, el que no viaja con el candidato, el que suele estar donde están los headquarters -cuartel general de la camapaña, en Chicago en este caso- encargado de coordinar todas las informacioens de la campaña, será Bill Burton. Burton ya trabajó en 2004 para la campaña presidencial de Dick Gephardt.
Cassandra Butts, quien durante años trabajó en la oficina del congresista Dick Gephardt, será la encargada del programa político del candidato. Los encargados de los sondeos de opinión y análisis del electorado, serán Paul Harstad y Cornell Belcher. Hastard trabajó el año pasado para la exitosa campaña al Senado de Claire McCaskill (D - Missouri), y Belcher es un experto en electorado afroamericano que trabajó para el Comité Nacional Demócrata en las elecciones del pasado año.
Otros nombres conocidos que trabajarán para Obama 2008 serán Devorah Adler, veterana oficial del DNC, y Alyssa Mastromonaco que hasta ahora ha sido directora del comité de acción política del senador.
También ha fichado a Matt Rodríguez para que sea su estratega para la primaria de New Hampshire. Rodríguez ya hizo ese mismo trabajo para el ex senador Bill Bradley en 2000, y para el ex congresista Dick Gephardt en 2004.
Dentro de unas horas hablaré con un amigo de Salt Lake City que me dará detalles sobre el equipo de campaña del republicano Mitt Romney. Team Mitt. A él le dedicaré mi próximo post. Ahora voy a tomarme el hamaiketako, el "aperitivo de las 11" en la cultura euskaldun. Chorizo frito con un buen trozo de queso. También algo de pollo frito para no desentonar.
Las primeras palabras que me dijo Cornelius sobre el senador de Illinois: "Ese hombre no es negro, yo no puedo sentir por él, el amor a un Hermano". Quedé sorprendido. Yo esperaba muestras de ilusión por parte de la comunidad negra de Nashville. Pero nada más lejos de la realidad. Después comprendí que negro significa en la realidad política y social de esta comunidad, alguien que desciende de los esclavos africanos. No es el caso de Obama.
He podido observar que esta opinión de Cornelius es la postura generalizada también entre los afroamericanos más notorios de la vida cultural del país. Mientras los analistas blancos ven en Obama un símbolo de unión en un país heterogeneo, hace poco leí en la revista Salon a la autora negra Debra Dickerson mantener la misma postura de desconfianza que veo en Cornelius cada mañana. "Black" no se refiere al color de piel sino más bien a unos orígenes, una filosofía, una herencia cultural.
Coincide esto con la encuesta que presentó el Washington Post al poco tiempo de que el Senador Obama anunciase su candidatura. El 60 % de los afroamericanos apoyaban a su rival blanca, Hillary Clinton. Obama conseguía solamente el 20 % de apoyo entre el electorado negro. La campaña es larga y Obama tiene menos reconocimiento de nombre que Clinton. Aún debe tratar de convencer a aquellos que son como él, pero que desconfían de él. Objetivo que no le será fácil.
Para tal empeño contará con un equipo de campaña que aún se encuentra en construcción. No es un equipo de perfil afroamericano, lo cual puede indicar que el verdadero objetivo de Obama es atraer el voto moderado y algo apolítico, así como el dinero de las grandes corporaciones que jamás financiarían a un candidato negro que no fuera capaz de traspasar las barreras raciales y culturales.
Aunque el equipo aún está abierto a cambios, dos de sus hombres de confianza manejarán la campaña. El director será David Plouffe. El mismo que dirigió su campaña para el Senado en 2004. Plouffe tiene sobrada experiencia en campañas electorales. En el año 2000 fue director ejecutivo del Democratic Congressional Campaign Committee para las elecciones al Congreso de ese año.
Anteriormente, fue subjefe de gabinete del congresista Dick Gephardt (D - Missouri) cuando este era Líder de la Minoría en la Cámara de Representantes; dirigió en 1996 la exitosa campaña de Bob Torricelli (D - New Jersey) al Senado; dirigió en 1994 la campaña del demócrata Charles Oberly al Senado por Delaware, esta no tan exitosa debido a que aquel año fue muy malo para los demócratas; dirigió en 1992 la campaña de reelección del congresista John Oliver (D - Massachusetts); y ese mismo año trabajó en la campaña presidencial del senador Tom Harkin (D - Iowa).
David Axelrod, de Chicago, otro hombre de total confianza de Obama, será el encargado de la propaganda, la publicidad televisiva y las relaciones con los medios de comunicación. Axelrod fue columnista del periódico conservador Chicago Tribune, hasta que decidió ser consultor político y fundó la consultoría Axelrod and Associates, ahora llamada AKP Message and Media. Axelrod trabajó para la campaña presidencial de John Edwards en 2004.
También estarán en el equipo de Obama algunos que pertenecieron en su día al staff del senador Tom Dashle (D - Dakota del Sur) cuando este era Líder de los demócratas en el Senado. Es el caso de Juliana Smoot, quien será jefa de finanzas de la campaña de Obama, y Dan Pfeiffer, que será el portavoz del candidato en sus desplazamientos por el país. El portavoz viajero que llaman allí.
El secretario de Prensa de la campaña, el que no viaja con el candidato, el que suele estar donde están los headquarters -cuartel general de la camapaña, en Chicago en este caso- encargado de coordinar todas las informacioens de la campaña, será Bill Burton. Burton ya trabajó en 2004 para la campaña presidencial de Dick Gephardt.
Cassandra Butts, quien durante años trabajó en la oficina del congresista Dick Gephardt, será la encargada del programa político del candidato. Los encargados de los sondeos de opinión y análisis del electorado, serán Paul Harstad y Cornell Belcher. Hastard trabajó el año pasado para la exitosa campaña al Senado de Claire McCaskill (D - Missouri), y Belcher es un experto en electorado afroamericano que trabajó para el Comité Nacional Demócrata en las elecciones del pasado año.
Otros nombres conocidos que trabajarán para Obama 2008 serán Devorah Adler, veterana oficial del DNC, y Alyssa Mastromonaco que hasta ahora ha sido directora del comité de acción política del senador.
También ha fichado a Matt Rodríguez para que sea su estratega para la primaria de New Hampshire. Rodríguez ya hizo ese mismo trabajo para el ex senador Bill Bradley en 2000, y para el ex congresista Dick Gephardt en 2004.
Dentro de unas horas hablaré con un amigo de Salt Lake City que me dará detalles sobre el equipo de campaña del republicano Mitt Romney. Team Mitt. A él le dedicaré mi próximo post. Ahora voy a tomarme el hamaiketako, el "aperitivo de las 11" en la cultura euskaldun. Chorizo frito con un buen trozo de queso. También algo de pollo frito para no desentonar.
domingo, 18 de marzo de 2007
El viaje de Thomas a Little Rock
Acaba de regresar Thomas Tomás de su viaje a Little Rock. Allí ha estado dos días investigando cuales puedan ser los pasos del General retirado de cuatro estrellas Wesley Clark en relación a la carrera presidencial. Thomas me trae una conclusión. Comprimida en una sóla frase. La frase que repiten los miembros del movimiento Draft Clark y la gente que habla y escucha al General. “I'm not a candidate for president, but I haven't said I won't run".
Thomas tuvo ocasión de almorzar ayer con James W. Urrutikoetxea, del Boston Courier. Lo hicieron en el restaurante italiano Ciao's, situado en el 7th Street de la capital de Arkansas. Un lugar que os recomiendo. El caso es que Urrutikoetxea, conocido como Patxiki en los círculos vasco-americanos, había viajado hasta Little Rock por el mismo motivo. Para investigar los pasos de Clark. Patxiki es el encargado del Boston Courier de cubrir la primaria de New Hampshire, y según él la última vez que Clark fue visto en el estado de granito fue el pasado 4 de marzo cuando acudió a un acto de recaudación de fondos en favor de la congresista Carol Shea-Porter.
Según Patxiki, las visitas de Clark a New Hampshire han sido menos frecuentes de lo que serían las visitas de alguien que se toma con seriedad la posibilidad de entrar en la carrera electoral. Pero también han sido más frecuentes y sospechosas que alguien que no tiene ninguna intención de aspirar a la Presidencia. Se despacha a gusto contra Bush, habla de los errores en Iraq, y defiende la necesidad de avanzar programas sociales progresistas. Y esto gusta a los activistas demócratas que participan en el proceso.
Entonces, ¿cual es el motivo por el que tarda tanto en dar el paso definitivo y anunciar su candidatura? Tiene muy fácil explicación. Wes Clark no es el tipo de hombre que se sienta a gusto pidiendo el voto subido a un escenario con un micrófono en la mano. Él es más un hombre de estudio de CNN, que sentado alrededor de una mesa y delante de un periodista explica sus opiniones de forma tranquila y ordenada.
Lo de dedicar 15 horas al día, sin interrupción y sin intimidad ni siquiera para comer, a recorrer el país de punta a punta es algo que le provoca vértigo. Sabe que hay muchos que son mejores que él haciendo eso, y a los que nunca podrá alcanzar tal y como están planteadas las carreras electorales hoy en día.
No entra en la batalla pero se mantiene a las puertas de la misma. Para que lo vean. Para seguir luciendo sus cuatro estrellas de General y nadie se olvide de su cara. Nadie se olvide que él puede cubrir muchas de las lagunas de los candidatos principales, aunque estos sean mejores que él vendiendo su producto. Él cree en su producto, pero no cree en su capacidad para venderlo.
Él sueña con un ticket Clinton-Clark u Obama-Clark. Puede que dentro de 3 meses lance su candidatura, cuando ya los demás le lleven mucha ventaja, y pueda hacer sin presión el tipo de campaña que a él le gusta. Más dirigido a convencer a los demás candidatos o a los jefazos del partido para que cuenten con él, que a convencer al público de que vote por él.
Él no tiene vocación de vendedor de electrodomésticos. Vicepresidente Clark, Secretario de Estado Clark... busca ser un hombre para la historia. Mientras tanto seguirá dando charlas en lugares donde no están los votos, como el Club Diplomático de la School of Foreign Service de la Universidad de Georgetown. Es lo que está haciendo precisamente mientras yo escribo estas líneas.
Thomas tuvo ocasión de almorzar ayer con James W. Urrutikoetxea, del Boston Courier. Lo hicieron en el restaurante italiano Ciao's, situado en el 7th Street de la capital de Arkansas. Un lugar que os recomiendo. El caso es que Urrutikoetxea, conocido como Patxiki en los círculos vasco-americanos, había viajado hasta Little Rock por el mismo motivo. Para investigar los pasos de Clark. Patxiki es el encargado del Boston Courier de cubrir la primaria de New Hampshire, y según él la última vez que Clark fue visto en el estado de granito fue el pasado 4 de marzo cuando acudió a un acto de recaudación de fondos en favor de la congresista Carol Shea-Porter.
Según Patxiki, las visitas de Clark a New Hampshire han sido menos frecuentes de lo que serían las visitas de alguien que se toma con seriedad la posibilidad de entrar en la carrera electoral. Pero también han sido más frecuentes y sospechosas que alguien que no tiene ninguna intención de aspirar a la Presidencia. Se despacha a gusto contra Bush, habla de los errores en Iraq, y defiende la necesidad de avanzar programas sociales progresistas. Y esto gusta a los activistas demócratas que participan en el proceso.
Entonces, ¿cual es el motivo por el que tarda tanto en dar el paso definitivo y anunciar su candidatura? Tiene muy fácil explicación. Wes Clark no es el tipo de hombre que se sienta a gusto pidiendo el voto subido a un escenario con un micrófono en la mano. Él es más un hombre de estudio de CNN, que sentado alrededor de una mesa y delante de un periodista explica sus opiniones de forma tranquila y ordenada.
Lo de dedicar 15 horas al día, sin interrupción y sin intimidad ni siquiera para comer, a recorrer el país de punta a punta es algo que le provoca vértigo. Sabe que hay muchos que son mejores que él haciendo eso, y a los que nunca podrá alcanzar tal y como están planteadas las carreras electorales hoy en día.
No entra en la batalla pero se mantiene a las puertas de la misma. Para que lo vean. Para seguir luciendo sus cuatro estrellas de General y nadie se olvide de su cara. Nadie se olvide que él puede cubrir muchas de las lagunas de los candidatos principales, aunque estos sean mejores que él vendiendo su producto. Él cree en su producto, pero no cree en su capacidad para venderlo.
Él sueña con un ticket Clinton-Clark u Obama-Clark. Puede que dentro de 3 meses lance su candidatura, cuando ya los demás le lleven mucha ventaja, y pueda hacer sin presión el tipo de campaña que a él le gusta. Más dirigido a convencer a los demás candidatos o a los jefazos del partido para que cuenten con él, que a convencer al público de que vote por él.
Él no tiene vocación de vendedor de electrodomésticos. Vicepresidente Clark, Secretario de Estado Clark... busca ser un hombre para la historia. Mientras tanto seguirá dando charlas en lugares donde no están los votos, como el Club Diplomático de la School of Foreign Service de la Universidad de Georgetown. Es lo que está haciendo precisamente mientras yo escribo estas líneas.
Team Rudy
Pete Azkargorta también me facilitó una completa lista de los asesores de campaña del ex alcalde de Nueva York, Rudy Giuliani. Pete conoce bien a Rudy. La primera vez que le tocó cubrir una campaña electoral fue cuando Giuliani aspiró sin éxito a la alcaldía de Nueva York en 1989. Muchas veces me cuenta Pete que el primer mitín electoral que cubrió en su vida fue uno que dio Rudy en el barrio de Tribeca aquel año. Noto especial ilusión en él porque el ex alcalde pueda convertirse en Presidente de EEUU.
Conozco a algunas de las figuras que trabajarán para su campaña. Otros no los conozco pero Pete me ha hablado mucho de ellos. Uno de los movimientos más notables de los que me informó mi amigo Pete ocurrió hace un par de meses. Giuliani contrató los servicios de la consultoría política Olsen & Shuvalov, una importante firma asentada en Texas y vinculada a Karl Rove.
El campaign manager será Mike DuHaime, que anteriormente ejerció como director ejecutivo de su comité exploratorio. La contratación de DuHaime representa un cambio de estrategia ya que las intenciones originales de Giuliani eran de otorgar las responsabilidades mayores de la campaña a gente que ya había estado trabajando para él en Nueva York. Motivo por el cual muchos analistas eran escépticos sobre las posibilidades de victoria de su campaña en un principio.
Pero DuHaime es una figura nacional, uno de los estrategas más respetados en el Comité Nacional Republicano, del que ha sido director político en los últimos años. Es un hombre muy vinculado a Ken Mehlman, el anterior presidente del Partido Republicano y quien manejó la campaña de reelección de Bush en 2004 con la famosa estrategia "get-out-the-vote".
El equipo financiero de la campaña estará liderado por Donna Henderson que será la "top fundraiser", jefa de finanzas. Henderson ha sido durante años recaudadora de fondos de diferentes causas republicanas y de la Asociación Nacional del Rifle. En un principio estaba previsto que Anne Dickerson, responsable de la recaudación de dinero del ticket Bush-Cheney en 2004, fuese la jefa de finanzas. Pero finalmente Dickerson tendrá un papel más secundario como consultora.
El subjefe de finanzas será Tom McGill. Un hombre que se hizo celebre el año pasado al lograr recaudar 10 millones de dólares para la campaña senatorial del republicano Mark Kennedy en Minnesota. Kennedy perdió la elección pero su maquinaria de recaudación no pasó desapercibida.
Otros dos nombres destacados que tendrán su papel en el equipo de finanzas de la campaña serán Tom Benedetti y Abby Farris, responsables de la firma Benedetti & Farris, que trabajaron para la fallida campaña de reelección del senador George Allen (R - Virginia) el pasado año.
La operación financiera de Giuliani también contará con una figura importante en cada lugar en el que huela a dinero más que en otros lugares:
Conozco a algunas de las figuras que trabajarán para su campaña. Otros no los conozco pero Pete me ha hablado mucho de ellos. Uno de los movimientos más notables de los que me informó mi amigo Pete ocurrió hace un par de meses. Giuliani contrató los servicios de la consultoría política Olsen & Shuvalov, una importante firma asentada en Texas y vinculada a Karl Rove.
El campaign manager será Mike DuHaime, que anteriormente ejerció como director ejecutivo de su comité exploratorio. La contratación de DuHaime representa un cambio de estrategia ya que las intenciones originales de Giuliani eran de otorgar las responsabilidades mayores de la campaña a gente que ya había estado trabajando para él en Nueva York. Motivo por el cual muchos analistas eran escépticos sobre las posibilidades de victoria de su campaña en un principio.
Pero DuHaime es una figura nacional, uno de los estrategas más respetados en el Comité Nacional Republicano, del que ha sido director político en los últimos años. Es un hombre muy vinculado a Ken Mehlman, el anterior presidente del Partido Republicano y quien manejó la campaña de reelección de Bush en 2004 con la famosa estrategia "get-out-the-vote".
El equipo financiero de la campaña estará liderado por Donna Henderson que será la "top fundraiser", jefa de finanzas. Henderson ha sido durante años recaudadora de fondos de diferentes causas republicanas y de la Asociación Nacional del Rifle. En un principio estaba previsto que Anne Dickerson, responsable de la recaudación de dinero del ticket Bush-Cheney en 2004, fuese la jefa de finanzas. Pero finalmente Dickerson tendrá un papel más secundario como consultora.
El subjefe de finanzas será Tom McGill. Un hombre que se hizo celebre el año pasado al lograr recaudar 10 millones de dólares para la campaña senatorial del republicano Mark Kennedy en Minnesota. Kennedy perdió la elección pero su maquinaria de recaudación no pasó desapercibida.
Otros dos nombres destacados que tendrán su papel en el equipo de finanzas de la campaña serán Tom Benedetti y Abby Farris, responsables de la firma Benedetti & Farris, que trabajaron para la fallida campaña de reelección del senador George Allen (R - Virginia) el pasado año.
La operación financiera de Giuliani también contará con una figura importante en cada lugar en el que huela a dinero más que en otros lugares:
- Christine Walton, antigua directora de finanzas del senador Jon Kyl (R - Arizona), será la encargada de atraer contribuyentes en la región del Sur-Oeste.
- Gretchen Adent Picotte será el recaudador en Florida, estado rico en donantes. En el pasado ha trabajado para el senador Mel Martinez y el congresista Clay Shaw.
- Brent Lowder para California. Es el estado que tradicionalmente más dinero contribuye a las campañas electorales. Lowder ya fue el encargado de recaudar dinero en 2002 para Bill Simon, entonces candidato republicano a gobernador de California.
- Carol Reed y Roy Bailey serán jefes de la operación en Texas. El segundo estado más rico, plagado de potentados siempre dispuestos a poner dinero en campañas políticas para ganar influencia en Washington. Los grandes donantes republicanos de Texas sufrirán además una especie de liberación este año después de haber estado monopolizados por Bush en las últimas dos presidenciales. Bailey fue tesorero del Comité Republicano de Texas.
El equipo de comunicación estará liderado por Katie Levinson, que ejercerá como directora de comunicaciones de la campaña. Levinson viene avalada por haber sido jefa de comunicaciones de la victoriosa campaña de reelección del gobernador Arnold Schwarzenegger en California. También trabajó en la Casa Blanca durante el primer mandato de Bush, como enlace entre los oficiales del gobierno y las televisiones.
Para centrarse únicamente en las operaciones mediáticas en Iowa y New Hampshire, se ha fichado a Maria Comella. Esta mujer fue el año pasado directora de comunicaciones de la campaña del republicano Jim Nussle para gobernador de Iowa. En 2004 fue jefa de comunicaciones del equipo Bush-Cheney en New Hamshire.
Además de todos esos nombres, Giuliani también contará con asesores leales que ya han trabajado para él en Nueva York, como Dennison Young, Peter Powers o John Gross.
sábado, 17 de marzo de 2007
Team Hillary
He llamado esta mañana a mi amigo Pete Azkargorta, periodista del New York Metropolitan, descendiente de guipuzcoanos y neoyorquino de tercera generación, para pedirle información acerca del equipo de campaña que trabajará para convertir a la senadora Hillary Clinton en una candidata viable.
Pete siguió de cerca sus dos campañas al Senado, por lo que tiene un profundo conocimiento de la mayoría de personajes que rodean a la senadora. De hecho estuvo infiltrado como voluntario en su primera campaña senatorial, consiguiendo suculentas informaciones sobre los métodos de financiación de la misma.
Ha visitado además con frecuencia en el último mes los headquartes de la campaña de Hillary en New Hampshire, situadas en el centro de Commerce Street, en la ciudad de Manchester. Donde están poniendo mucho empeño para la primaria de New Hampshire, dado que la victoria en Iowa la dan por segura al contar con el apoyo de los dinosaurios del partido.
Pete me ha facilitado una completa lista de nombres, algunos sobradamente conocidos, otros menos conocidos, que tendrán posiciones privilegiadas en la cocina de Hillary en los próximos dos años. Él los llama Clinton Inc., porque funcionan como una máquina antipática y desagradable pero efectiva. Hay de todo. Gente que lleva con ella todos estos años entre Nueva York y Washington. Y gente que recién ha incorporado por sus éxitos al frente de otras campañas en años recientes.
El antiguo presidente del Partido Demócrata, Terry McAullife, será el presidente de su campaña. Un cargo de valor simbólico. Lo que allí llaman "chairman" de la campaña. Que no es lo mismo que director de campaña, allí llamado "campaign manager", el que realmente dirige la estrategia.
La jefa de campaña de Hillary, la "campaign manager", será Patti Solis Doyle, mujer hispana que ha manejado sus dos campañas al Senado en 2000 y 2006, y que ha trabajado para Hillary Clinton desde la primera campaña presidencial de su marido en 1992.
Su número dos será Mike Henry, conocido por haber dirigido en 2005 la exitosa campaña del demócrata Tim Kaine para gobernador de Virginia.
Howard Wolfson, hasta ahora asesor del senador Charles Schumer (D - Nueva York), será el director de comunicaciones de la campaña.
Evelyn Lieberman, antigua oficial de la Casa Blanca durante la Administración Clinton, será la jefa de operaciones generales.
Jonathan Mantz será el jefe de finanzas de la campaña. Mantz ya fue jefe de finanzas de la campaña gubernatorial del gobernador de Nueva Jersey, Jon Corzine, en 2005.
Neera Tanden, antigua asesora del Presidente Bill Clinton, y actualmente directora legislativa de la senadora Hillary Clinton en el Senado, será la directora de asuntos políticos de su campaña.
Mandy Grunwald será la asesora mediática, la que se encargue de la publicidad televisiva. Ya tuvo esta misma función en las campañas de Hillary para el Senado en 2000 y 2006, y trabajó para Bill Clinton en 1992.
Phil Singer será el subdirector de comunicaciones. En las elecciones del pasado mes de noviembre trabajó para el Democratic Senatorial Campaign Committee.
Otros que formarán parte del equipo de campaña de la senadora serán: Ann Lewis, que fue subdirectora de la campaña de reelección del presidente Clinton en 1996; Minyon Moore, antiguo director de asuntos políticos en la Administración Clinton; Leecia Eve, ex candidata a vicegobernadora de Nueva York; Mark Penn, un experto en encuestas y opinión pública que trabajó en la Casa Blanca en els egundo mandato de Bill Clinton; y Kim Molstre, quien trabajó para la candidatura presidencial del ex congresista Dick Gephardt en las primarias de 2004 y que después se incorporó al equipo de campaña del senador John Kerry.
Tampoco debemos olvidarnos de los dos grandes gurús electorales del partido en la última década, James Carville y Paul Begala, que también tendrán su papel en la campaña. Sin cargo oficial, pero para muchos los verdaderos coordinadores de todo.
Pete siguió de cerca sus dos campañas al Senado, por lo que tiene un profundo conocimiento de la mayoría de personajes que rodean a la senadora. De hecho estuvo infiltrado como voluntario en su primera campaña senatorial, consiguiendo suculentas informaciones sobre los métodos de financiación de la misma.
Ha visitado además con frecuencia en el último mes los headquartes de la campaña de Hillary en New Hampshire, situadas en el centro de Commerce Street, en la ciudad de Manchester. Donde están poniendo mucho empeño para la primaria de New Hampshire, dado que la victoria en Iowa la dan por segura al contar con el apoyo de los dinosaurios del partido.
Pete me ha facilitado una completa lista de nombres, algunos sobradamente conocidos, otros menos conocidos, que tendrán posiciones privilegiadas en la cocina de Hillary en los próximos dos años. Él los llama Clinton Inc., porque funcionan como una máquina antipática y desagradable pero efectiva. Hay de todo. Gente que lleva con ella todos estos años entre Nueva York y Washington. Y gente que recién ha incorporado por sus éxitos al frente de otras campañas en años recientes.
El antiguo presidente del Partido Demócrata, Terry McAullife, será el presidente de su campaña. Un cargo de valor simbólico. Lo que allí llaman "chairman" de la campaña. Que no es lo mismo que director de campaña, allí llamado "campaign manager", el que realmente dirige la estrategia.
La jefa de campaña de Hillary, la "campaign manager", será Patti Solis Doyle, mujer hispana que ha manejado sus dos campañas al Senado en 2000 y 2006, y que ha trabajado para Hillary Clinton desde la primera campaña presidencial de su marido en 1992.
Su número dos será Mike Henry, conocido por haber dirigido en 2005 la exitosa campaña del demócrata Tim Kaine para gobernador de Virginia.
Howard Wolfson, hasta ahora asesor del senador Charles Schumer (D - Nueva York), será el director de comunicaciones de la campaña.
Evelyn Lieberman, antigua oficial de la Casa Blanca durante la Administración Clinton, será la jefa de operaciones generales.
Jonathan Mantz será el jefe de finanzas de la campaña. Mantz ya fue jefe de finanzas de la campaña gubernatorial del gobernador de Nueva Jersey, Jon Corzine, en 2005.
Neera Tanden, antigua asesora del Presidente Bill Clinton, y actualmente directora legislativa de la senadora Hillary Clinton en el Senado, será la directora de asuntos políticos de su campaña.
Mandy Grunwald será la asesora mediática, la que se encargue de la publicidad televisiva. Ya tuvo esta misma función en las campañas de Hillary para el Senado en 2000 y 2006, y trabajó para Bill Clinton en 1992.
Phil Singer será el subdirector de comunicaciones. En las elecciones del pasado mes de noviembre trabajó para el Democratic Senatorial Campaign Committee.
Otros que formarán parte del equipo de campaña de la senadora serán: Ann Lewis, que fue subdirectora de la campaña de reelección del presidente Clinton en 1996; Minyon Moore, antiguo director de asuntos políticos en la Administración Clinton; Leecia Eve, ex candidata a vicegobernadora de Nueva York; Mark Penn, un experto en encuestas y opinión pública que trabajó en la Casa Blanca en els egundo mandato de Bill Clinton; y Kim Molstre, quien trabajó para la candidatura presidencial del ex congresista Dick Gephardt en las primarias de 2004 y que después se incorporó al equipo de campaña del senador John Kerry.
Tampoco debemos olvidarnos de los dos grandes gurús electorales del partido en la última década, James Carville y Paul Begala, que también tendrán su papel en la campaña. Sin cargo oficial, pero para muchos los verdaderos coordinadores de todo.
viernes, 16 de marzo de 2007
Quieren ser Presidente de EEUU
Para empezar, he pedido a mi ayudante Peru Hornblower que vaya haciendo biografías en castellano en la Wikipedia de todos los precandidatos que se presentan a las elecciones. Está en ello. Algunas de ellas necesitan ser actualizadas. No creo que tarde mucho en completarlas todas. Peru es bien conocido por su eficiencia en todo el condado de Davidson.
Acude todos los días a la Nashville Public Library, una de las bibliotecas más legendarias del Sur de EEUU, fundada en 1898 con el nombre de Howard Library, para recabar información sobre la biografía política de todos los candidatos y así poder incorporar a la Wikipedia actualizaciones de calidad.
Tenemos a estas alturas de la carrera un total de 18 aspirantes a la Presidencia de EEUU. Contando a los muy serios y a los medio serios. Y descartando de plano a aquellos que no van a tener ninguna cobertura mediática. Nos quedaríamos así con 8 demócratas y 10 republicanos.
Demócratas
Hillary Clinton - Doctorada en Derecho por la Universidad de Yale. Senadora por Nueva York desde 2001. Primera Dama de EEUU (1993-2001).
John Edwards - Graduado en Derecho por la Universidad de Carolina del Norte. Senador por Carolina del Norte (1999-2005). Candidato del Partido Demócrata a la vicepresidencia de EEUU (2004).
Barack Obama - Graduado en Ciencias Políticas por la Universidad de Columbia y doctorado magna cum laude en Derecho por la Universidad de Harvard. Senador por Illinois desde 2005. Miembro de la Asamblea Estatal de Illinois (1997-2005).
Bill Richardson - Graduado en Ciencias Políticas por la Universidad de Tufts y master en Leyes y Diplomacia por la Fletcher School. Gobernador de Nuevo Mexico desde 2003. Reelegido en noviembre pasado. Secretario de Eenergía de EEUU (1998-2001). Embajador de EEUU ante la ONU (1997-1998). Miembro de la Cámara de Representantes de EEUU por Nuevo México (1983-1997).
Joe Biden - Graduado en Derecho por la Universidad de Syracuse. Senador por Delaware desde 1973. Actualmente presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado. Presidente del Comité Judicial del Senado (1987-1995).
Christopher Dodd - Graduado en Literatura Inglesa por la Providence College y graduado en Derecho por la Universidad de Louisville. Senador por Connecticut desde 1981. Presidente del Comité sobre Banca, Vivienda y Asuntos Urbanos del Senado. Presidente del Partido Demócrata (1995-1997). Miembro de la Cámara de Representantes de EEUU (1975-1981).
Dennis Kucinich - Graduado en Humanidades por la Case Western Reserve University. Congresista por Ohio desde 1997. Alcalde de Cleveland (1978-1979).
Mike Gravel - Graduado en Economía por la Universidad de Columbia. Senador por Alaska (1969-1981).
Republicanos
John McCain - Graduado por la Academia Naval de los Estados Unidos. Senador por Arizona desde 1987. Miembro de la Cámara de Representantes de EEUU por Arizona (1983-1987). Retirado del ejército de EEUU en 1981 con el rango de capitán.
Rudy Giuliani - Graduado cum laude en Derecho por la Universidad de Nueva York. Alcalde de Nueva York (1994-2002). Fiscal del Distrito Sur de Nueva York (1983-1989). Asistente del Fiscal General de EEUU, número tres del Departamento de Justicia, (1981-1983). Jefe de la Unidad de Narcóticos de la Oficina del Fiscal General (1973-1977).
Mitt Romney - Graduado summa cum laude en Humanidades por la Universidad de Brigham y graduado cum laude en Derecho por la Universidad de Harvard. Gobernador de Massachusetts (2003-2007). Presidente de la Asociación de Gobernadores Republicanos (2005-2007). Presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Salt Lake City (1999-2002). Presidente de Bain & Company Inc. (1990-1999). Fundador y presidente de Bain Capital (1984).
Sam Brownback - Doctorado en Derecho por la Universidad de Kansas. Senador por Kansas desde 1996. Miembro de la Cámara de Representantes de EEUU por Kansas (1995-1996). Secretario de Agricultura de Kansas (1986-1993).
Tommy Thompson - Graduado en Derecho por la Universidad de Wisconsin. Secretario de Sanidad de EEUU (2001-2005). Gobernador de Wisconsin (1987-2001). Miembro de la Asamblea Estatal de Wisconsin (1967-1987).
Duncan Hunter - Doctorado en Derecho por la Western State University. Congresista por California desde 1981. Presidente del Comité de Defensa de la Cámara de Representantes (2003-2007).
Jim Gilmore - Graduado en Derecho por la Universidad de Virginia. Gobernador de Virginia (1998-2002). Presidente del Partido Republicano (2001-2002). Fiscal General de Virginia (1994-1998).
Mike Huckabee - Graduado magna cum laude en Humanidades por la Universidad Baptista de Ouachita y graduado en Teología por la Southwestern Baptist Theological Seminary. Gobernador de Arkansas (1996-2007). Vicegobernador de Arkansas (1993-1996). Presidente de la Asociación Nacional de Gobernadores (2005-2006). Presidente de la Asociación de Gobernadores Sureños (1999-2000). Considerado por la revista Time como uno de los 5 mejores gobernadores de la Unión. Presidente de la Convención de Iglesias Baptistas de Arkansas (1989-1991).
Tom Tancredo - Graduado en Ciencias Políticas por la Universidad de Colorado. Congresista por Colorado desde 1999. Presidente del think tank 'Independence Institute' (1993-1999).
Ron Paul - Doctorado en Medicina por la Universidad de Duke. Congresista por Texas desde 1976. Candidato a la presidencia de EEUU por el Partido Libertario en 1988.
Y aún queda por ver si nombres como Al Gore, Fred Thompson, Chuck Hagel, Newt Gingrich, George Pataki o Wesley Clark deciden entrar en la carrera. Tendrán que darse prisa si quieren ser presidente.
Mi amigo Thomas Tomás, del Nashville Today, no para de telefonear a Little Rock para averiguar si el General Clark tiene o no intenciones de presentarse, pero nunca terminan de confirmárselo. Tampoco se lo desmienten.
Así que le he aconsejado que este fin de semana coja su viejo cadillac azul de 1967 y se dirija hasta la capital de Arkansas a investigar los movimientos de los headquarters de Wes Clark. Lo queremos en la carrera. Ya informaré de lo que sepa.
Acude todos los días a la Nashville Public Library, una de las bibliotecas más legendarias del Sur de EEUU, fundada en 1898 con el nombre de Howard Library, para recabar información sobre la biografía política de todos los candidatos y así poder incorporar a la Wikipedia actualizaciones de calidad.
Tenemos a estas alturas de la carrera un total de 18 aspirantes a la Presidencia de EEUU. Contando a los muy serios y a los medio serios. Y descartando de plano a aquellos que no van a tener ninguna cobertura mediática. Nos quedaríamos así con 8 demócratas y 10 republicanos.
Demócratas
Hillary Clinton - Doctorada en Derecho por la Universidad de Yale. Senadora por Nueva York desde 2001. Primera Dama de EEUU (1993-2001).
John Edwards - Graduado en Derecho por la Universidad de Carolina del Norte. Senador por Carolina del Norte (1999-2005). Candidato del Partido Demócrata a la vicepresidencia de EEUU (2004).
Barack Obama - Graduado en Ciencias Políticas por la Universidad de Columbia y doctorado magna cum laude en Derecho por la Universidad de Harvard. Senador por Illinois desde 2005. Miembro de la Asamblea Estatal de Illinois (1997-2005).
Bill Richardson - Graduado en Ciencias Políticas por la Universidad de Tufts y master en Leyes y Diplomacia por la Fletcher School. Gobernador de Nuevo Mexico desde 2003. Reelegido en noviembre pasado. Secretario de Eenergía de EEUU (1998-2001). Embajador de EEUU ante la ONU (1997-1998). Miembro de la Cámara de Representantes de EEUU por Nuevo México (1983-1997).
Joe Biden - Graduado en Derecho por la Universidad de Syracuse. Senador por Delaware desde 1973. Actualmente presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado. Presidente del Comité Judicial del Senado (1987-1995).
Christopher Dodd - Graduado en Literatura Inglesa por la Providence College y graduado en Derecho por la Universidad de Louisville. Senador por Connecticut desde 1981. Presidente del Comité sobre Banca, Vivienda y Asuntos Urbanos del Senado. Presidente del Partido Demócrata (1995-1997). Miembro de la Cámara de Representantes de EEUU (1975-1981).
Dennis Kucinich - Graduado en Humanidades por la Case Western Reserve University. Congresista por Ohio desde 1997. Alcalde de Cleveland (1978-1979).
Mike Gravel - Graduado en Economía por la Universidad de Columbia. Senador por Alaska (1969-1981).
Republicanos
John McCain - Graduado por la Academia Naval de los Estados Unidos. Senador por Arizona desde 1987. Miembro de la Cámara de Representantes de EEUU por Arizona (1983-1987). Retirado del ejército de EEUU en 1981 con el rango de capitán.
Rudy Giuliani - Graduado cum laude en Derecho por la Universidad de Nueva York. Alcalde de Nueva York (1994-2002). Fiscal del Distrito Sur de Nueva York (1983-1989). Asistente del Fiscal General de EEUU, número tres del Departamento de Justicia, (1981-1983). Jefe de la Unidad de Narcóticos de la Oficina del Fiscal General (1973-1977).
Mitt Romney - Graduado summa cum laude en Humanidades por la Universidad de Brigham y graduado cum laude en Derecho por la Universidad de Harvard. Gobernador de Massachusetts (2003-2007). Presidente de la Asociación de Gobernadores Republicanos (2005-2007). Presidente del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Salt Lake City (1999-2002). Presidente de Bain & Company Inc. (1990-1999). Fundador y presidente de Bain Capital (1984).
Sam Brownback - Doctorado en Derecho por la Universidad de Kansas. Senador por Kansas desde 1996. Miembro de la Cámara de Representantes de EEUU por Kansas (1995-1996). Secretario de Agricultura de Kansas (1986-1993).
Tommy Thompson - Graduado en Derecho por la Universidad de Wisconsin. Secretario de Sanidad de EEUU (2001-2005). Gobernador de Wisconsin (1987-2001). Miembro de la Asamblea Estatal de Wisconsin (1967-1987).
Duncan Hunter - Doctorado en Derecho por la Western State University. Congresista por California desde 1981. Presidente del Comité de Defensa de la Cámara de Representantes (2003-2007).
Jim Gilmore - Graduado en Derecho por la Universidad de Virginia. Gobernador de Virginia (1998-2002). Presidente del Partido Republicano (2001-2002). Fiscal General de Virginia (1994-1998).
Mike Huckabee - Graduado magna cum laude en Humanidades por la Universidad Baptista de Ouachita y graduado en Teología por la Southwestern Baptist Theological Seminary. Gobernador de Arkansas (1996-2007). Vicegobernador de Arkansas (1993-1996). Presidente de la Asociación Nacional de Gobernadores (2005-2006). Presidente de la Asociación de Gobernadores Sureños (1999-2000). Considerado por la revista Time como uno de los 5 mejores gobernadores de la Unión. Presidente de la Convención de Iglesias Baptistas de Arkansas (1989-1991).
Tom Tancredo - Graduado en Ciencias Políticas por la Universidad de Colorado. Congresista por Colorado desde 1999. Presidente del think tank 'Independence Institute' (1993-1999).
Ron Paul - Doctorado en Medicina por la Universidad de Duke. Congresista por Texas desde 1976. Candidato a la presidencia de EEUU por el Partido Libertario en 1988.
Y aún queda por ver si nombres como Al Gore, Fred Thompson, Chuck Hagel, Newt Gingrich, George Pataki o Wesley Clark deciden entrar en la carrera. Tendrán que darse prisa si quieren ser presidente.
Mi amigo Thomas Tomás, del Nashville Today, no para de telefonear a Little Rock para averiguar si el General Clark tiene o no intenciones de presentarse, pero nunca terminan de confirmárselo. Tampoco se lo desmienten.
Así que le he aconsejado que este fin de semana coja su viejo cadillac azul de 1967 y se dirija hasta la capital de Arkansas a investigar los movimientos de los headquarters de Wes Clark. Lo queremos en la carrera. Ya informaré de lo que sepa.
jueves, 15 de marzo de 2007
Me presento
Mi nombre es Antxon Garrogerrikabeitia III. Comencé mi aventura americana hace algunos años trabajando como niño pastor en el rancho de la familia Aldekoaotalora, cerca de Mountain City, en la frontera entre Nevada y Idaho. Naturalmente sin contrato. Mi especialidad era la tarea de capar a los corderos tal y como me enseñaron en Euzkadi. Con los dientes.
Mi vida en Mountain City era el tipo de vida que cualquier vasco desearía. Contemplando cada día territorios en los que el cielo, las montañas, los ríos y las praderas... todo se vuelve monumental. Zonas de agricultores y ganaderos que nos dieron a los inmigrantes vascos la oportunidad de poder ejercer lo que mejor sabemos hacer, comer carne y queso en el hamaiketako.
Pero yo era un joven cargado de inquietudes intelectuales y necesitaba algo más. Después de un fallido intento por presentarme al puesto de Sheriff de Mountain City -perdí por escasos 15 votos sin saber una palabra de inglés pero es que allí "Basques rule the crowd"-, mi suerte cambió cuando el Reno Basque Club me concedió una beca para estudiar en la Universidad de Reno. Allí aprendí el inglés y, sin apenas darme cuenta, me convertí en todo un experto en Cultura Americana, materia de la que me gradué.
A partir de entonces no me han faltado ofertas de trabajo. He sido profesor interino en las Universidades de Milwakee, Cheyenne, Omaha y Knoxville. He trabajado con éxito en el Cincinnati Tribune, el Albuquerque Enquirer y el Tallahassee Telegraph. He recorrido el país escribiendo sobre etnografía y he sido galardonado con premios como el Águila de Oro al Estudio de la Carne Vacuna del Oeste, o el Corazón Púrpura al Valor en el Combate de Forasteros en el Condado de Callaway, Missouri.
Mi última experiencia laboral fue algo decepcionante. Fue en el Toledo Post -también conocido como TP-, el decimo cuarto periódico del Estado de Ohio. Todo iba bien hasta que el dueño del periódico, Lewis Tilemaker, se enamoró del cabecilla de un grupo guerrillero nazi, Mister Pious, que tenía un campo de entrenamiento en las Montañas Rocosas. Este tipo estaba en busca y captura por el FBI, por lo que tuvo que huir del país y el señor Tilemaker lo acompañó. Ambos se exiliaron en España. Lo último que supimos los trabajadores del TP es que se casaron en Madrid y ahora Tilemaker trabaja como becario en El Mundo. Lo que hace el amor...
El caso es que el Toledo Post tuvo que cerrar y tuvimos que buscarnos la vida. Tras darme a la bebida durante unos meses, pronto recibí una oferta que no podía rechazar. El Nashville Sentinel, el periódico de mayor tirada de Tennessee, me contrató para encargarme de cubrir la campaña electoral para las presidenciales de 2008. Esa será mi función en los próximos dos años. Gracias a un amigo de origen catalán llamado Thomas Tomás, que me recomendó al Nashville Sentinel. Él en realidad trabaja para el periódico rival del Sentinel, el Nashville Today, el típico diario segundón de la ciudad. Pero es un buen chico.
Estoy a gusto en Nashville, capital mundial de la Música Country Western, acompañado de mi encantadora amada Aletxu, descendiente de la casa de los Vergara de toda la vida. Situados aquí a lo largo de los bancos del Río Cumberland que observo desde la ventana de mi escritorio.
Pues a eso me dispongo. Hasta noviembre de 2008 mi función será cubrir las elecciones presidenciales de EEUU. Para ello contaré con la inestimable colaboración de mi inseparable ayudante Peru Hornblower, conocido también como Peru "I'm voting for Dukakis" Hornblower o Peru Dukakis a secas.
Parece ser que en octubre de 1988 se le ocurrió decir en el centro de Tennessee "I'm voting for Dukakis". Eso le cambió la vida. Después de ser expuesto ante el asombro del público, como ejemplar casi único en todos los circos del Sur de EEUU, logró hacer una pequeña fortuna abriendo la primera agencia de representación de freakys del estado de Tennessee. Los servicios de esa agencia fueron solicitados por gente como Lamar Alexander que ahora es Senador, o Al Gore que ahora es ganador de Oscar.
Espero que las mías sean las mejores informaciones y los mejores análisis sobre la campaña electoral en toda la red. No dudo de que así será. No me dejaré comprar por la campaña de ningún candidato, a pesar de que ahora mismo tengo al otro lado de la puerta esperando a los abogados de Hillary Clinton para ofrecerme una millonada. Y hace un par de días fui amenazado por dos enviados de Rudy Giuliani, de que si hablaba sobre sus opiniones pasadas sobre el aborto, ellos desvelarían a mi familia de Euzkadi que mi RH es positivo. No acepté el trato, siendo esa la mejor muestra de mi integridad. A mí sólo se me gana por el estómago.
Mi vida en Mountain City era el tipo de vida que cualquier vasco desearía. Contemplando cada día territorios en los que el cielo, las montañas, los ríos y las praderas... todo se vuelve monumental. Zonas de agricultores y ganaderos que nos dieron a los inmigrantes vascos la oportunidad de poder ejercer lo que mejor sabemos hacer, comer carne y queso en el hamaiketako.
Pero yo era un joven cargado de inquietudes intelectuales y necesitaba algo más. Después de un fallido intento por presentarme al puesto de Sheriff de Mountain City -perdí por escasos 15 votos sin saber una palabra de inglés pero es que allí "Basques rule the crowd"-, mi suerte cambió cuando el Reno Basque Club me concedió una beca para estudiar en la Universidad de Reno. Allí aprendí el inglés y, sin apenas darme cuenta, me convertí en todo un experto en Cultura Americana, materia de la que me gradué.
A partir de entonces no me han faltado ofertas de trabajo. He sido profesor interino en las Universidades de Milwakee, Cheyenne, Omaha y Knoxville. He trabajado con éxito en el Cincinnati Tribune, el Albuquerque Enquirer y el Tallahassee Telegraph. He recorrido el país escribiendo sobre etnografía y he sido galardonado con premios como el Águila de Oro al Estudio de la Carne Vacuna del Oeste, o el Corazón Púrpura al Valor en el Combate de Forasteros en el Condado de Callaway, Missouri.
Mi última experiencia laboral fue algo decepcionante. Fue en el Toledo Post -también conocido como TP-, el decimo cuarto periódico del Estado de Ohio. Todo iba bien hasta que el dueño del periódico, Lewis Tilemaker, se enamoró del cabecilla de un grupo guerrillero nazi, Mister Pious, que tenía un campo de entrenamiento en las Montañas Rocosas. Este tipo estaba en busca y captura por el FBI, por lo que tuvo que huir del país y el señor Tilemaker lo acompañó. Ambos se exiliaron en España. Lo último que supimos los trabajadores del TP es que se casaron en Madrid y ahora Tilemaker trabaja como becario en El Mundo. Lo que hace el amor...
El caso es que el Toledo Post tuvo que cerrar y tuvimos que buscarnos la vida. Tras darme a la bebida durante unos meses, pronto recibí una oferta que no podía rechazar. El Nashville Sentinel, el periódico de mayor tirada de Tennessee, me contrató para encargarme de cubrir la campaña electoral para las presidenciales de 2008. Esa será mi función en los próximos dos años. Gracias a un amigo de origen catalán llamado Thomas Tomás, que me recomendó al Nashville Sentinel. Él en realidad trabaja para el periódico rival del Sentinel, el Nashville Today, el típico diario segundón de la ciudad. Pero es un buen chico.
Estoy a gusto en Nashville, capital mundial de la Música Country Western, acompañado de mi encantadora amada Aletxu, descendiente de la casa de los Vergara de toda la vida. Situados aquí a lo largo de los bancos del Río Cumberland que observo desde la ventana de mi escritorio.
Pues a eso me dispongo. Hasta noviembre de 2008 mi función será cubrir las elecciones presidenciales de EEUU. Para ello contaré con la inestimable colaboración de mi inseparable ayudante Peru Hornblower, conocido también como Peru "I'm voting for Dukakis" Hornblower o Peru Dukakis a secas.
Parece ser que en octubre de 1988 se le ocurrió decir en el centro de Tennessee "I'm voting for Dukakis". Eso le cambió la vida. Después de ser expuesto ante el asombro del público, como ejemplar casi único en todos los circos del Sur de EEUU, logró hacer una pequeña fortuna abriendo la primera agencia de representación de freakys del estado de Tennessee. Los servicios de esa agencia fueron solicitados por gente como Lamar Alexander que ahora es Senador, o Al Gore que ahora es ganador de Oscar.
Espero que las mías sean las mejores informaciones y los mejores análisis sobre la campaña electoral en toda la red. No dudo de que así será. No me dejaré comprar por la campaña de ningún candidato, a pesar de que ahora mismo tengo al otro lado de la puerta esperando a los abogados de Hillary Clinton para ofrecerme una millonada. Y hace un par de días fui amenazado por dos enviados de Rudy Giuliani, de que si hablaba sobre sus opiniones pasadas sobre el aborto, ellos desvelarían a mi familia de Euzkadi que mi RH es positivo. No acepté el trato, siendo esa la mejor muestra de mi integridad. A mí sólo se me gana por el estómago.
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